Paula Prendes, primera expulsada de 'MasterChef Celebrity 3'

El famoso 'talent' arranca una nueva entrega que promete mucha diversión

Por hola.com

Las cocinas de MasteChef Celebrity volvieron a encenderse este domingo para recibir una nueva edición (la tercera) del popular 'talent show', que este año cuenta entre sus filas con 14 aspirantes de lujo, entre los que encontramos a las actrices Paz Vega, Dafne Fernánez, el intérprete Iván Massague, los deportistas Ona Carbonell y Jaime Nava,  la socialité Carmen Lomana,  Mario Vaquerizo, Santiago Segura o Paula Prendes...

Precisamente, fue la presentadora y actriz asturiana Paula Prendes la primera expulsada por el jurado, al que no convencieron sus recetas, y tuvo que marcharse entre lágrimas tras no superar la primera prueba eliminatoria en la que los concursantes tuvieron que elaborar unos bombones de chocolate.

Los momentos más emocionantes del estreno de 'Mastechef Celebrity 3'

Pero no todo fueron lágrimas, esta primera noche de emociones dio para mucho y nos regaló otros grandes momentos que, sin duda, abren nuestro apetito para esta suculenta temporada que nos espera.

Uno de los momentos más emocionantes de la noche fue caundo Antonia Dell'Atte salva de la prueba de eliminación a Paz Vega, a la que, además, dedicó unas bonitas palabras de reconocimiento: "Es una mujer trabajadora y siempre me ha demostrado lealtad", remarcó. Como cabe imaginar, el plató no pudo evitar contener las lágrimas.

Otro de los momentos más divertidos fue el que protagonizó Boris Izaguirre cuando Oscar Higares presentó su plato, Pluma Ibérica con verdinas y puré de apio. A la reacción del jurado, que destacó su buen hacer, le siguió el humor espontáneo de Boris: "¡Viva la pluma, viva la pluma!", comenzó a gritar despertando las risas entre sus compañeros.

Cómo no, también se vivieron momentos de nervios a flor de piel. La prueba de exteriores fue uno de los más caóticos, ya que puso en evidencia la tremenda desorganización del equipo azul para presentar los platos a tiempo. Sin embargo, la buena actitud de los concursantes consiguió salvar el momento y rebajar la tensión. Y es que, como en todas las ediciones, no falta el compañerismo,
las risas (y también las lágrimas), pero, sobre todo, mucha cocina.