Refrescantes alimentos de verano
Las verduras, las frutas, las ensaladas y las cremas frías se convierten en los imprescindibles del verano. Te decimos por qué
Es muy probable que con la llegada del calor hayas comenzado a comer “distinto”. Y es posible que te hayas dado cuenta de que no es el primer año que ‘sufres’ esta transformación. No temas. No tiene nada que ver con el hecho de que estés a dieta o que la ‘operación bikini’ se haya apoderado de tu cerebro. Tiene que ver con una reacción natural de nuestro cuerpo ante esta estación del año.
Apetece comer ligero, fresco, sano… El cuerpo nos pide algo tan sencillo como que lo hidratemos por dentro y por fuera, porque el gasto de líquidos es mucho mayor durante este época del año. Así que no escatimes en el consumo de agua.
Pero hay otros ‘esenciales’ que deben estar en nuestra nevera durante todo el verano. Y tenemos suerte, porque precisamente son alimentos que compatibilizan perfectamente con la dieta. Se trata de las frutas y verduras de temporada: sandía, melón, uvas, peras, melocotones, ciruelas, tomates, pepinos, berenjenas, pimientos…
Todos estos alimentos son deliciosos, sí, pero además, perfectos para la temporada estival, porque aportan a nuestra piel la hidratación y los antioxidantes necesarios para frenar los radicales libres que producen los rayos del sol. Todo un invento, porque además de limpiar nuestro cuerpo de grasa, mantendremos nuestra piel en perfecto estado de hidratación, sin una arruga.
Porque en verano las frutas tienen un mayor contenido de agua que en invierno y eso nos ayuda a mantener el nivel de hidratación requerida. Pero además hay que consumir líquidos en forma de cremas frías o incluso polos de hielo. Así que si tienes que comer en la oficina, aprovecha para llevar ensaladas, gazpachos, batidos y al menos una pieza de fruta al día.
Pero también tienes que tener en cuenta que estos productos se estropean con más facilidad durante el verano. Las frutas, tan deliciosas en su punto justo de maduración, pasan con rapidez al ‘demasiado blando’ si no cuentas con el frigorífico adecuado. A nosotros nos gustan mucho los frigoríficos Bosch.
Siempre han sido marca de referencia, pero desde hace un tiempo lo son aún más. Esto se debe a su nuevo cajón HydroFresh, pensado para conservar las frutas y las verduras hasta el doble de tiempo que en un cajón convencional en perfecto estado. En su interior se regula la humedad en el grado óptimo para conservar las propiedades de estos sanísimos alimentos, manteniendo sus vitaminas, minerales, sabor y frescura. Te damos un ejemplo. Los frigoríficos HydroFresh de Bosch garantizan que la lechuga pasará de aguantar 20 días a hacerlo hasta 60. Una idea de lo más tentadora.
Si quieres otra tentación de Bosch te la damos: si participas en su promoción de frigoríficos comprando uno A++, A +++ o con cajón HydroFresh, puedes conseguirlo totalmente gratis o con un reembolso seguro. Entra en su web e infórmate.
Más información:
www.bosch-home.es
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Pero hay otros ‘esenciales’ que deben estar en nuestra nevera durante todo el verano. Y tenemos suerte, porque precisamente son alimentos que compatibilizan perfectamente con la dieta. Se trata de las frutas y verduras de temporada: sandía, melón, uvas, peras, melocotones, ciruelas, tomates, pepinos, berenjenas, pimientos…
Todos estos alimentos son deliciosos, sí, pero además, perfectos para la temporada estival, porque aportan a nuestra piel la hidratación y los antioxidantes necesarios para frenar los radicales libres que producen los rayos del sol. Todo un invento, porque además de limpiar nuestro cuerpo de grasa, mantendremos nuestra piel en perfecto estado de hidratación, sin una arruga.
Porque en verano las frutas tienen un mayor contenido de agua que en invierno y eso nos ayuda a mantener el nivel de hidratación requerida. Pero además hay que consumir líquidos en forma de cremas frías o incluso polos de hielo. Así que si tienes que comer en la oficina, aprovecha para llevar ensaladas, gazpachos, batidos y al menos una pieza de fruta al día.
Pero también tienes que tener en cuenta que estos productos se estropean con más facilidad durante el verano. Las frutas, tan deliciosas en su punto justo de maduración, pasan con rapidez al ‘demasiado blando’ si no cuentas con el frigorífico adecuado. A nosotros nos gustan mucho los frigoríficos Bosch.
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