La alta cocina española está de luto. El reconocido cocinero catalán Santi Santamaría, de 53 años, ha fallecido hoy. El chef de Can Fabes se encontraba de viaje en Singapur para presentar a toda la prensa internacional su nuevo establecimiento, 'Santi' (en el resort de lujo 'Marina Bay Sands'), cuando, según parece, un fallo cardiaco le sobrevino causándole la muerte.
Santamaría, firme defensor de la cocina mediterránea tradicional, era una de las grandes figuras de la gastronomía en nuestro país. Así, podía presumir de ser uno de los cocineros españoles con más estrellas Michelin, entre ellas las tres que ostenta su buque insignia, ‘Can Fabes’; las dos de las del madrileño Santceloni; la otorgada a Evo (en L'Hospitalet de Llobregat) o la del toledano Tierra.
UNA COCINA SÓLIDA Y CON RAÍCES
Desde 1994, año en que le fue concedida la codiciada tercera estrella de la Guía Michelin, su restaurante, El Racó de Can Fabes (después Can Fabes 'a secas'), emplazado en la vieja casa familiar que lo vio nacer, ha atraído a los gourmets del mundo entero hasta los pies del Montseny con una cocina sólida y con raíces, de apariencia sencilla y gran base humanista, comprometida con su entorno y alejada de lo superficial. Inconformista y rebelde, Santi Santamaría comenzó a cocinar para huir de la situación social y política en la que vivía y con la que no estaba de acuerdo. Se dedicaba a cocinar cuando su trabajo como dibujante técnico y sus estudios en la escuela industrial se lo permitían. Un día decidió cambiar el lapicero por el delantal, pero siguió creando, en este caso, recetas.
'ERA UNO DE LOS GRANDES'
AsÍ ha definido a Santamaría otro gran 'espada' de la cocina; el gran Juan Mari Arzak. 'Estoy anonadado, es terrible, no tengo palabras para expresarlo', ha declarado el vasco que a pesar de polémicas pasadas (el catalán mantuvo en el pasado ciertas discrepancias con algunos de sus colegas por el uso de productos químicos en la alta cocina) era un gran amigo suyo 'de toda la vida'. Muestras de dolor a las que ya se han sumado también otros grandes chefs como Martín Berasategui, Xabier Pellicer, Carme Ruscalleda, Joan Roca, Sergi Arola, Dani García, Pedro Subijana. Ferran Adrià...
Santamaría, que acababa de ser abuelo la semana pasada, deja tras su desaparición un hueco irremplazable en el mundo de los fogones, en el que lo hizo todo o casi todo: sus laureados restaurantes: sus libros sobre cocina; sus líneas propias de productos gourmet; sus colaboraciones en disitintos medios de comunicación (entre ellos, la revista ¡HOLA!), o su más reciente blog sobre gastronomía son parte de su gran legado. Descanse en paz.