El cocinero Ángel León (restaurante Aponiente) volvió a sorprender una vez más en su intervención en 'Madrid Fusión'. Si el año pasado dejaba boquiabiertos a los asistentes con un carbón ecológico elaborado con huesos de aceitunas, esta vez el gaditano mostró un nuevo aderezo con intenso sabor a mar: el fitoplancton. Una innovación que pronto se comercializará en los mercados bajo el nombre de Algar Mare.
Pero además de Ángel León, el día de ayer contó con otros platos fuertes. Entre ellos, la ponencia ‘Small Plates’ la última tendencia en EEUU. De las tapas a las medias raciones’ que puso en evidencia la moda cada vez más presente en ciudades como Nueva York o Washington de ofertar en los restaurantes pequeñas raciones a modo de degustación. Algo que ya practica desde hace tiempo el asturiano José Andrés en su local norteamericano ‘Jaleo’ y que resulta similar a nuestro ‘tapeo’ (sin ser exactamente lo mismo, ambos tienen en común el deseo del comensal de comer de manera informal a precios más asequibles). Así lo mostraron chefs como David Chang y Sotohiro Kosugi, en cuyo local neoyorquino ((Momofuku) hay colas de hasta un año de espera.
También ‘Madrid Fusión’ quiso rendir homenaje a ‘los cocineros más influyentes de la última década’ (Ferran Adrià, Juan Mari Arzak, Michel Bras, Pierre Gagnaire, Heston Blumenthal, Nobu Matsuhisa, Charlie Trotter, Thomas Keller, Pierre Hermé, Gualtiero Marchesi y Alain Ducasse) a quienes se les impuso el delantal de oro, confeccionado por la diseñadora Amaya Arzuaga.
Además, esta jornada de la cumbre contó con especial presencia femenina; a la ponencia de Elena Arzak se sumo la intervención de ‘Las grandes damas de cocina mexicana’, entre ellas Patricia Quintana y Mónica Patiño (de los restaurantes Naos e Izote respectivamente, ambos en México DF).
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