La bebida energética dulce conocida como Milo fue creada en Australia para dar respuesta a los problemas de nutrición de los niños durante la gran depresión a principios de los años 30. Tomas Mayne fue su inventor y el nombre elegido para lanzar este nutritivo producto asociado al deporte y la salud hace honor al atleta griego Milón de Crotona, el más célebre de la Antigua Grecia gracias a su fuerza. Y es que consiguió, hasta en 6 ocasiones, alzarse con el título de campeón olímpico de Lucha.
¿Sabías que es una de las 10 bebidas más consumidas en todo el planeta? Desde su lanzamiento ha sido el desayuno de millones de niños y deportistas en todo el mundo gracias a su aporte energético y a su irresistible sabor a chocolate. Caliente, frío, con hielo, también para merendar o a cualquier hora del día… ¡Una taza de Milo siempre apetece!
Su inigualable sabor lo convierte en un ingrediente perfecto para elaborar ricos dulces a base de chocolate. A continuación, proponemos una receta de 'brownies' que le darán un exquisito toque gracias a la deliciosa mezcla del cacao y la malta tan peculiar del Milo.
Ingredientes necesarios para preparar la receta (4/6 personas)
-1 taza de Milo.
- 4 huevos.
-210 gr. de mantequilla.
-2 tazas de harina.
-2 tazas de azúcar.
-1 cucharadita de vainilla.
-¼ de cucharadita de levadura.
-1 cucharadita de sal.
Pasos para la elaboración
Lo primero es precalentar el horno a 180° y derretir la mantequilla en una cacerola sin que llegue a hervir. Tras ello, hay que batir los huevos junto con el azúcar y la vainilla y agregar la mantequilla derretida pero no muy caliente, y mezclar.
Después incorporamos a la masa la harina, la sal y el cuarto de cucharada de levadura previamente tamizados y batimos hasta obtener una mezcla homogénea. Ahora añadimos la taza de Milo y volvemos a mezclar hasta que se integren bien todos los ingredientes.
Engrasamos y enharinamos el molde seleccionado y vertemos la mezcla, que hornearemos unos 30 minutos o hasta que introduciendo un palillo en los brownies éste salga limpio.
Puedes utilizar moldes individuales aptos para 'brownies' o verter la masa en un recipiente cuadrado o rectangular de poca altura y cortarlos en después porciones.
En esta ocasión no hemos puesto nueces en la elaboración, aunque la receta original lleve este fruto seco. Como pasa con otros postres, el origen de este bizcocho de chocolate con nueces fue un accidente culinario. El cocinero que estaba preparando su receta habitual olvidó ponerle levadura a la masa. El sorprendente resultado fue un exquisito bizcocho al que bautizó como ‘Brownie’ (marroncito) por su color oscuro.
Para disfrutar al máximo de este dulce que te hemos propuesto, nada como acompañarlo con una buena bola de helado de vainilla.