Entrevistamos a Marta Hazas: 'Ahora entiendo por qué dicen que el día de tu boda es el más feliz de tu vida'
Marta Hazas es la actriz de la eterna sonrisa, porque todo en ella es ilusión, ganas de vivir y comerse el mundo. Días después de celebrar su boda de cuento de hadas con Javier Veiga en Santander, la protagonista de Velvet vuelve feliz al trabajo como imagen de la nueva colección de zapatos Merkal. La actriz, que vive un inmejorable momento tanto en el terreno personal como el profesional, no ha dudado en presumir de alianza y ha confesado a HOLA.com que como todo lo bueno se hace esperar, su luna de miel también lo hará. En su mesa se le acumulan los proyectos, uno de ellos con su marido, Javier Veiga, en el teatro. Hablamos con Marta del día de su boda, de sus sueños y de lo que está por venir, aunque ella tiene claro que no serán los niños.
-Vuelves a ser imagen de la firma de calzado Merkal. ¿Eres de las que piensan que la elegancia se viste por los pies?
Sí, yo creo que con un buen zapato puedes realzar tu look o cargártelo.
-¿Qué tipo de calzado te gusta?
Me gusta el calzado cómodo, que no me ponga de mal humor porque me hace daño. En mi día a día soy de llevar zapatillas o bailarinas, pero me encantan los zapatos.
-¿Te tuviste que cambiar de zapatos el día de tu boda?
Aguante muchísimo con los zapatos, pero como luego Merkal había puesto manoletinas para regalar a mis invitadas, me dio mucha envidia y a las tres de la mañana me pasé a las manoletinas.
-¿Cómo fue el día de tu boda? ¿Disfrutaste?
Me parecía un topicazo lo de que es el día más feliz de tu vida y no entendía por qué, pero ahora sí que lo entiendo. Es un día en el que logras reunir a toda la gente que ha formado parte de tu vida. Fue como una exaltación del amor, ya no solo por con quien te casas, sino en general por ver lo bien que se llevan sus amigos con mis amigos, su familia con la mía. Fue un día muy bonito.
-¿Elegir como escenario el Palacio de la Magdalena te hizo revivir el rodaje de 'Gran Hotel'?
Ha sido a la inversa porque cuando rodaba 'Gran Hotel' me venían mis recuerdos de infancia. Mi abuelo, además de tener librerías en Santander, en verano tenía una caseta de playa en la Magdalena y he jugado allí toda mi vida. Entonces me recordaba a mi infancia y cuando llegaba el chofer a casa para ir al rodaje pensaba: ‘Es un sueño hecho realidad'.
-Elegiste a tu amigo Jorge Vázquez para que diseñara tu vestido de novia ¿Tuviste algo que ver en el diseño o te dejaste sorprender?
No fue una sorpresa, participe en el diseño claro, no estoy tan loca, pero si que confié mucho en él. Fui viendo los bocetos y al principio no tenía esa idea pero luego fue la que prevaleció, un vestido con flores y tul. Me encantó porque era muy diferente.
-¿Qué momento de ese día te ha dejado huella?
Yo soy del norte y me cuesta mostrar en público mis debilidades. Ese día, con tantas emociones a flor de piel, me marcó ver que la gente estaba igual de emocionada que yo. Lo más emocionante fue sentir que he elegido muy bien a la gente de la que me quiero rodear.
-¿Cómo es tu vida de casada?
Igual, no ha cambiado. Sigo trabajando, en los ensayos...
-Tu perrita Robin fue la protagonista inesperada de la boda
Si, fue genial. Yo que he tenido perros desde pequeña, quería que estuviera ese día. En un momento dado pensé que podría llevar los anillos, pero es un poco traviesa y al final vino el sobrino de Javi a dárnoslos. Pero la verdad es que se portó muy bien. Fran, el adiestrador de perros, fue el que se encargó de que nadie estuviera pringado ese día.
-¿Qué piensas ahora al ver tu alianza de boda?
Pues que es un anillo monísimo.
-Si cierras los ojos y te imaginas el futuro ¿qué ves?
Me veo en el teatro, haciendo proyectos Javi y yo juntos, y me veo rodeada de la misma gente que asistió a mi boda. Solo puedo ir sumando gente.
-Ahora que te has casado, ¿te gustaría ser mamá?
No, la verdad es que no.
-¿Y la luna de miel?
La dejaremos para el año que viene porque Javier y yo estrenamos la obra '5 y acción' el día 23 de noviembre en el teatro Reina Victoria. Pero está muy bien porque así vas teniendo alicientes y no haces de golpe todo lo divertido, sino que primero haces el fiestón y luego el año que viene, cuando paremos en el teatro, nos vamos de viaje.
-Vives una etapa indescriptible y llena de proyectos, ¿después de 'Velvet' qué vendrá?
Además de 'El Hormiguero' y '5 y acción', tenemos una serie piloto, que no puedo contar mucho más, y hay varios proyectos encima la mesa. Ahora es importante elegir muy bien, porque me he puesto a mí misma el listón muy alto con Velvet, Bandolera, El Internado y Gran Hotel.
-¿Te ilusiona trabajar en el teatro con tu marido en ‘5 y acción’?
Ya hemos trabajado juntos, pero sí claro, es muy divertido irnos de gira juntos...Hemos hecho un equipillo muy bueno.
-¿Cómo es tu marido como jefe?
Como ya le he conocido como jefe, no hay novedad.
-Según avanza la entrevista me doy cuenta de que no desaparece tu sonrisa. ¿Te consideras una mujer con carácter?
Sí, pero las pataletas me las dejo para casa, igual que los dramas.
-¿Te da pena que acabe 'Velvet'?
Me da muchísima pena porque para mí Clara es un personaje soñado y he hecho muchos amigos.
-¿Con quién tienes una amistad especial?
Con Paula (Echevarría), Cecilia (Freire), Javi Rey, ellos tres sin ninguna duda. Y con Adrián Lastra, Manuela Velasco, Asier Etxeandía, Miriam Giovanelli también. Amaia (Salamanca) y yo ya éramos amigas de 'Gran Hotel' y 'SMS'.
-¿Qué ha supuesto para tí el personaje de Clara?
Desde que era pequeña mi ilusión era encanar a todas esas mujeres de Hitchcock y mi papel de Clara ha sido lo más aproximado que podría hacer. Una serie de los años 50, de época, ha sido como un sueño hecho realidad.
¿Estás satisfecha con el resultado final de 'Velvet'?
Sí, sí y sí.
-¿Entonces la serie termina bien?
Bueno, a mí me gusta como acaba. Estoy muy contenta porque ha sido una temporada muy redonda al ser grabada sabiendo que era la última.
-Después del inmejorable momento sentimental y profesional, ¿qué le pides a la vida?
Que me quede como estoy, que siga así y que vaya creciendo poco a poco, porque si te digo la verdad estoy encantada.