"Las épocas buenas vienen con todo y soy muy afortunada en el amor y en el trabajo. Estoy muy bien, muy contenta". Con estas palabras y un brillo especial en la mirada hablaba María Valverde hace unos días del momento tan dulce que está viviendo. No puede (ni quiere) negarlo y está feliz al lado de Gustavo Dudamel, el director de orquesta que le ha devuelto la sonrisa. "El amor es la base de todo, sobre todo el amor propio", explicó la actriz, de 29 años, que habló de su chico como alguien que ya forma parte de su "familia" en su reciente visita a Madrid para acudir al estreno de su nueva película, Gernika.
De hecho, a pesar de que ante los fotógrafos prefirió posar sola, al terminar el evento 'corrió' a los brazos de su chico para seguir disfrutando de la noche. Románticos besos, miradas con las que sobran las palabras, caricias, abrazos... Unos gestos llenos de amor que, en definitiva, demuestran lo felices que están. "Soy una persona que vive el día a día, es lo más sano que se puede hacer", afirmó la protagonista de Tres metros sobre el cielo, que aseguró que casarse o ser madre no es algo que se haya planteado en un futuro próximo: "No lo pienso, prefiero vivir el presente".
- María Valverde, puro romanticismo con su nuevo amor
Y es que tras su ruptura con el también actor Mario Casas en septiembre de 2014, en un principio María quiso mantener su relación fuera de los focos, pero parece ser que ya no quiere ocultar su amor por el músico venezolano, de 35 años. Gustavo, que es considerado como uno de los directores de orquesta más importantes e influyentes del mundo, se divorció hace un año de Eloísa Maturén, bailarina de ballet clásico y periodista, con quien tiene un hijo, Martín, de ocho años.
La actriz española hizo un viaje exprés a nuestro país y tan sólo estuvo en Madrid unos días. Y es que Valverde ha empezado el nuevo curso con fuerza: "Ahora tengo cuatro películas por estrenar y los próximos proyectos no los puedo decir, pero hay cositas".