Marta Hazas, una chica 'Velvet' muy enamorada
La actriz ha aprovechado la celebración del 43 cumpleaños de su chico para proclamar su amor por él
Marta Hazas y Javier Veiga forman una bonita y discreta pareja, cuyo amor nada tiene que envidiar al de las relaciones más mediáticas. Los actores ya han cumplido cinco años de silencioso y discreto noviazgo. Sin embargo, en ocasiones especiales gritan su amor a los cuatro vientos, como anoche, cuando Marta publicó en su cuenta personal de Instagram esta foto para felicitar a su chico por su 43 cumpleaños. "Yo sé de uno que ya tiene más años que número de pie... ¡Feliz cumleaños amor!", escribió.
La pareja ha celebrado el cumpleaños de Javier en Madrid, días después de acudir a la 30 edición de los Goya. Aunque evitaron posar juntos en la alfombra roja, los actores disfrutaron de una gala en la que Marta entregó el premio mejor dirección de fotografía que fue para Migue Amoedo por La Novia.
Tras su ruptura con Sergio Mur, felizmente unido a Olivia Molina, Marta rehizo su vida sentimental en 2010 al lado de Javier. Además de una bonita historia de amor, ambos comparten su pasión por el teatro. Aunque a muchas parejas les daría miedo mezclar amor con trabajo, lo cierto es que la actriz cántabra y el intérprete gallego no parecen tener ningún problema y se han subido juntos en más de una ocasión a los escenarios para interpretar El Caballero de Olmedo, un clásico de Lope de Vega, o Amigos hasta la muerte.
Marta estudió Periodismo antes de dedicarse a la interpretación, su gran pasión. Aunque ha trabajado en cine, teatro y televisión, en este último medio es el que le ha dado la popularidad por su participación en series de gran éxito. "Hay un antes y después de Bandolera. El Internado me descubrió. Y con Velvet, estoy recogiendo las mieles y los frutos", asegura la actriz. Javier, por su parte, dejó sus estudios de Arquitectura para estudiar Arte Dramático. A lo largo de su dilatada trayectoria, ha trabajado en el teatro, donde fundó su propia compañía, en series de éxito, como monologuista en El club de la comedia, animando juegos de póker y dirigiendo sus propios cortometrajes.