En esta ocasión no era sólo un viaje de pareja, era una escapada para tres. Macarena Gómez y su marido Aldo Comas hicieron las maletas para hacer un breve viaje a Córdoba, tierra de la artista y en la que esta tenía un compromiso profesional. Pero no viajaron solos sino en la mejor de las compañías. Con ellos iba su hijo Dante, que tiene ya seis meses -nació el pasado tres de abril- e iba cómodamente en su cochecito. Y es que teniendo unos padres viajeros, como es el caso, no es de extrañar que él también lo sea.
En este viaje, mientras Macarena participaba en la XIII Muestra de cine Rural de Dos Torres, Aldo practicaba su afición al paracaidismo sobrevolando Córdoba, tal y como él mismo mostró en sus redes sociales. Dante es el primer hijo de la pareja, un bebé que les ha llenado no sólo de felicidad sino de deseos como el que expresó su padre, cuyo cumpleaños casualmente coincide con el de su hijo. Doble motivo de celebración.
Macarena Gómez, imparable tras su reciente maternidad: ‘Yo soy feliz trabajando’
Macarena Gómez da la bienvenida a su primer hijo
“El viernes pasado cumplí 30 años y nuestro hijo llegó al mundo. Pura magia. Hoy puedo decir que he vuelto a nacer con la misión de que este retoño sea la persona más feliz y querida del mundo” escribió Aldo en sus redes para anunciar su nacimiento. Macarena tardó apenas 10 días en volver al trabajo después de ser madre, presumiendo entonces de estupenda figura. La actriz, uno de los rostros más divertidos de la televisión gracias a su papel en la serie La que se avecina, aseguró: “Yo soy feliz trabajando”.
Y es que la llegada de su bebé coincidió además con un momento excelente de su carrera, tras haber recibido su primera nominación a los premios Goya por la película Musarañas. Fue precisamente esa noche de premios cuando Macarena marcó su embarazo con un ajustado vestido, una noticia sobre la que nunca había querido pronunciarse de manera expresa. La llegada de su niño puso un auténtico broche de oro a la historia de la pareja, que se casó en julio de 2013 en una divertida ceremonia en la iglesia de San Miguel de Fluvia, en la Costa Brava, tras la cual saltaron en paracaídas.