Macarena Gómez inicia la recta final de su embarazo con unas merecidas vacaciones

Macarena Gómez siempre se ha declarado una orgullosa andaluza y una enamorada de su Córdoba natal. Si a esto le sumamos que muy pronto dará la bienvenida a su primer hijo, la Semana Santa se ha convertido en un momento idóneo para que ella y su marido, Aldo Comas, agoten la dulce espera en la tierra que vio nacer a la actriz hace treinta y siete años.

Aprovechando que la primavera entró por la puerta grande y que muy pronto se convertirá en mamá, la actriz lo está celebrando con paseos por los lugares emblemáticos de la ciudad, acudiendo a las tradicionales procesiones que se celebran por estas fechas y también con algunos encuentros con amigos, como con la cantante Nita del grupo cordobés Fuel Fandango.

La pareja disfruta ahora de un descanso merecidísimo y más si tenemos en cuenta que la actriz ha estado al pie del cañón durante todo el embarazo, que ha coincidido con un estupendo periodo profesional de la actriz. Además de no parar de trabajar, Macarena ha estado presente en todos los eventos relacionados con el séptimo arte que han tenido lugar en nuestro país, puesto que este era el primer año que estaba nominada a los Premios Goya por la película Musarañas.

Aunque fue finalmente Bárbara Lennie la que se llevó el galardón a casa por Magical Girl, Macarena fue una de las grandes protagonistas, puesto que fue en la gran fiesta del cine español, cuando habló por primera vez de su embarazo, evidente ya en el ajustadísimo diseño de Lorenzo Caprile y cuando aclaró que no querían saber el sexo del bebé porque son "aventureros".

Sin embargo, la confirmacion de la pareja -que se mostró de lo más ilusionada y compenetrada- llegó cuando la feliz noticia era ya un secreto a voces, puesto que la primera vez que corrió el rumor corría el mes de septiembre. Así que aunque nunca han llegado a confirmar la fecha estimada para recibir a su primer hijo, muy pronto Macarena Gómez y Aldo Comas verán ampliada la familia. Hasta que llegue el momento de los biberones y los llantos nocturnos, ¿qué mejor que disfrutar de unas vacaciones al calor del hogar?