Inolvidable fue la película e inolvidable la celebración de su 50 aniversario. Sonrisas y Lágrimas celebra sus bodas de oro y ha querido hacerlo de una forma muy especial. Los veteranos actores Julie Andrews y Christopher Plummer revivieron su papel de Froilan María y el Capitán von Trapp en el aniversario de este clásico cinematográfico. Una imagen para el recuerdo del actor, de 85 años, y la actriz, de 79, posando juntos de nuevo. Andrews, radiante con un traje de chaqueta negro con blusa blanca, deleitó a los asistentes con su gran sonrisa, mientras que Plummer, con elegante traje de chaqueta, camisa azul y corbata de lunares, asistió al Teatro Chino de Hollywood, donde se proyectó una versión especial de esta película, que conmovió a niños y a mayores. Durante el mes de abril una versión restaurada de la película será exhibida en más de 500 cines con motivo de su 50 aniversario.
Christopher Plummer siempre fue crítico con la película, de hecho declaró que en un principio no tenía ninguna intención de interpretar al Capitán, aunque su opinión varió mucho con los años. “Es una película muy bien hecha y Robert Wise hizo un trabajo sensacional. Julie Andrews fue absolutamente maravillosa. Me torturaba a menudo porque no estaba contento con el papel, no fue muy emocionante pero, ya sabes, era un tonto que pasaba por unos malos días en ese momento. Ha cambiado mi perspectiva completamente respecto a la película", de esta manera el actor justificaba su visión negativa de hace años. Sonrisas y lágrimas fue una cinta musical basada en la historia de una monja que ejerce como niñera de una familia adinerada y se enamora del cabeza de familia.
Julie Andrews, que fue sorprendida con un emotivo homenaje en la pasada edición de los Oscar interpretado por Lady Gaga, no dudó en confesar que "si alguien me hubiera dicho que hoy estaríamos celebrando el 50 aniversario de la película no me lo hubiera creído. Nunca". Por desgracia Julie Andrews perdió la voz que le hizo tan famosa tanto en esta película como en el clásico Mary Poppins con el que obtuvo un Oscar. En 1997 la actriz se sometió a una cirugía en las cuerdas vocales que desgraciadamente hizo que perdiera su cualidad de cantar, sumiendo a Andrews en una depresión. "Perder mi voz fue devastador", revela a la revista People.
"Durante mucho tiempo estuve en un estado de negatividad total. Pero tenía que hacer algo", explicaba. "Sin embargo, el lema de Sonrisas y Lágrimas es cierto: 'Cuando una puerta se cierra, se abre una ventana'". Al perder la voz, se dedicó junto a su hija Emma Walton Hamilton a escribir una serie de libros infantiles. "De no haber perdido la voz... no habría escrito estos libros. Nunca habría descubierto el placer de escribir”. Además de escribir, Andrews ha participado en películas como Princesa por sorpresa o haber puesto su voz en Gru mi villano favorito.
¿Qué ha sido del resto de sus protagonistas?
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