De vuelta a casa, pero esta vez sin premio. Clara Lago y Dani Rovira asistieron a la entrega de los premios de la Unión de Actores, galardones en los que de nuevo se dieron cita bastantes rostros conocidos del cine y el teatro dispuestos a aplaudir los triunfos de sus compañeros. En esta ocasión Clara estaba nominada en dos categorías, actriz principal por Ocho apellidos vascos y revelación por la obra de teatro La venus de las pieles, aunque no pudo ser. Habría sido sin duda un excelente regalo por su reciente 25 cumpleaños, un aniversario que celebró junto al que se ha convertido en su inseparable compañero en estos últimos meses, Dani Rovira.
Clara comentó que “en breve” (está previsto entre abril y mayo) se pondrá a grabar con Dani la secuela de Ocho apellidos vascos. “Es una película que me ha dado tanto a mí y a todos los que hemos participado, ha sido tan mágico todo… Me quedo con la magia”. Dijo además que hay muy buen ambiente entre los compañeros, que repetirán en sus papeles: “Se formó una bonita familia y nos apetece volver a currar todos juntos”. Habló además de su reciente estancia en Los Ángeles, donde “hizo un casting”, aunque de momento no tiene ningún proyecto en firme y comentó cómo fue su cena con Antonio Banderas. “Es una persona maravillosa, un tío con una generosidad y humildad tremendas. No lo conocía y me he quedado gratamente impresionada”.
En esta cita con Banderas estuvo claro su novio, que la acompañó también en esta noche de premios. No posaron tampoco en esta ocasión en la alfombra roja, pero se sentaron juntos en el patio de butacas y mostraron, de nuevo sin palabras, que están tan enamorados como el primer día (ya llevan ocho meses juntos). A veces una mirada es más que suficiente.
Seguro que veremos muchas miradas cómplices más en la cinta Ocho apellidos vascos 2, que promete sin duda otro montón de momentos divertidos y esa complicidad entre la pareja que se vio en la primera. En ella estarán además Karra Elejalde y Carmen Machi, que coincidieron con Clara y Dani en la citada entrega de premios y subieron a recoger el suyo como mejores secundarios en la que fue la comedia más taquillera del pasado año. Los cuatro han formado una “pequeña gran familia”, lo que se pudo comprobar en el cariñoso saludo a su llegada.
En esta velada, recibieron también premio Pepe Viyuela, mejor actor secundario de televisión por la serie Aída; Javier Gutiérrez (actor protagonista), Mercedes León (actriz de reparto) y Manolo Soro (actor de reparto), por La Isla Mínima, uno de los grandes éxitos del año; y Elena Anaya, por su papel en Todos están muertos. Una de las mayores ovaciones fue para José Sacristán, que recogió el premio de honor de manos de su compañera Concha Velasco. Sacristán dijo en tono cómico que llegó a pensar que nunca le premiarían sus compañeros. "Afortunadamente, me pilla trabajando en unas circunstancias que son un privilegio, por poder participar de la aventura de trabajo y vida de tanto joven con amor a este oficio", concluyó muy emocionado.