Melanie Griffith afronta una difícil etapa con su mejor sonrisa. Días después de solicitar el divorcio de Antonio Banderas, la actriz ha reaparecido a su llegada al Festival Internacional de Taormina. Pese a que días atrás habíamos visto a Melanie luciendo su alianza de boda, ahora la actriz ha decidido desprenderse de ella en su primera aparición pública tras su separación. Melanie Griffith está decidida a comenzar una nueva vida y para ello se ha quitado el anillo dejando atrás los casi 18 años que duró su matrimonio con Antonio Banderas.
La actriz, de 56 años, llegó a la ciudad siciliana acompañada por su publicista Robin Baum, luciendo vaqueros, camiseta blanca y una tímida sonrisa. Su estancia en Taormina se debe a que Melanie recibirá uno de los premios del certamen por su contribución cinematográfica. Allí coincidirá con su amiga Eva Longoria, que también ya ha llegado a tierras sicilianas, y que será otra de las premiadas de esta edición. Juntas compartirán largas conversaciones y confidencias. De hecho era Longoria quien acompañó a Melanie la noche anterior a hacerse pública su separación de Banderas en la gala de los premios AFI en Los Ángeles.
Pide la custodia de sus tres perros
Las últimas informaciones acerca de su divorcio apuntan a que además de la custodia de su hija Stella del Carmen y al margen del reparto de su fortuna en común, valorada en 37 millones de euros y sus numerosas propiedades en Los Ángeles, Nueva York, Miami, Aspen y Marbella, otra de las preocupaciones de Melanie Griffith es quedarse con la custodia de las tres mascotas adoptadas junto a Banderas. El matrimonio los adoptó el año pasado de un centro de recogida de animales: un terrier y dos hermanos mestizos de labrador y pastor alemán y la actriz ahora ha reclamado su custodia