A Kate Winslet no le pueden ir mejor las cosas. Tras ser madre por tercera vez de un niño llamado Bear, la feliz mamá acaba de ser homenajeada con una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, en Los Ángeles. La oscarizada actriz descubrió la placa con su nombre instalada en la acera en una ceremonia, en la que estuvo acompañada por el reparto de su próxima película, Divergent. Se trata de la primera aparición pública desde que diera a luz a su hijo Bear en diciembre de 2013. Fantástica y sin dejar de sonreír, Kate Winslet lució un sencillo vestido negro para acudir a la ceremonia.
La actriz británica, de 38 años, confesó sentirse "muy feliz" y contó cómo fue su amanecer tras registrarse un seismo de magnitud 4'4 en Los Ángeles. "Me asusté mucho. Corrí debajo del marco de una puerta", hasta que la tierra dejó de temblar, contó la actriz, que no estaba junto a su hijo Bear, ya que se trataba de un viaje relámpago. "Sólo iba a estar en Los Ángeles 48 horas, no podía traerle. Tiene sólo 14 semanas de vida y son 12 horas de avión. Es demasiado lejos", contó en el programa de Ellen Degeneres.
Horas más tarde la ciudad de Los Ángeles recuperó la calma y Winslet fue homenaje en el Paseo de la Fama. La actriz contó con el apoyo de Kathy Bates, a quien conoció cuando rodó Titanic, filme con el que Winslet alcanzaría fama internacional. "Titanic fue hace 18 años, ¿os lo podéis creer? Celebré mi 21 cumpleaños durante ese rodaje. Es realmente maravilloso estar aquí y recibir este premio, este momento maravilloso en mi vida que nunca olvidaré", aseguró la actriz, que también estuvo acompañada por la joven Shailene Woodley, protagonista de Divergent.
La estrella de Kate Winslet es la número 2.520 en colocarse en el suelo de la célebre avenida de Los Ángeles, cerca de la esquina donde se cruza el bulevar de Hollywood y la calle Vine, lugar en el que también se encuentran las estrellas de Shakira y Thalía.