Venecia fue el siguiente destino de la tourné de la familia Pinault, Salma Hayek y su marido, Francois-Henri Pinault, viajaron con su hija Valentina, de cinco años, a la ciudad de los canales para asistir a su cita con la Bienal de Venecia, una exposición de arte contemporáneo que se celebra cada dos años y reúne a diversas personalidades que se prodigan por las cenas y fiestas que se suceden en la ciudad italiana.
Salma Hayek, de 46 años, con look marinero, de pantalón blanco y camiseta a rayas, aterrizó el pasado martes en el aeropuerto marco Polo de la mano de su esposo, con quien parece estar atravesando un momento inmejorable, y su hija Valentina. Cuatro años han pasado desde su boda en París y su posterior celebración en Venecia, pero la pareja parece estar viviendo en una completa luna de miel. Miradas cómplices y gestos de cariño se sucedieron nada más pisar suelo italiano. Y es que recordemos que fue en Venecia donde se conocieron hace siete años con motivo de una exposición en el Palacio Grassi, propiedad del magnate francés y que alberga una de las pinacotecas más grandes del mundo de arte contemporáneo.
Turismo, un tradicional paseo en góndola, visita a La Bienal, cenas de gala... La agenda de los Pinault no se detiene ni un segundo. Tal vez el evento más importante de estos días ha sido la cena 'Fondazione Cini, Isola Di San Giorgio' organizada por su marido, Pinault, y la actriz causó sensación con su vestuario. Enfundada en un vestido de cuero, sexy pero sin dejar de ser elegante, Salma se convirtió en el centro de todas las miradas. La pareja, experta en estas lídes, ejerció de perfecta anfitriona en una velada a la que asistieron algunos de los invitados con más glamour de la alta sociedad italiana y demás países europeos.
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