Disfrutando al máximo de su tiempo juntos. Keira Knightley y su ya marido James Righton disfrutan estos días de su luna de miel en Córcega. La pareja, que se dio el “sí quiero” en una sencilla ceremonia en el ayuntamiento de Mazan, en la Provenza francesa, el pasado fin de semana tras dos años de noviazgo, se mostró más unida que nunca. Con ropa cómoda y siguiendo fielmente su estilo desenfadado y casual, Keira y su marido se subieron a una lancha para dar un paseo por la costa de la isla, algo que se ha convertido en una de sus actividades favoritas estos días.
Los besos apasionados de los recién casados son la mejor muestra, sin necesidad de palabras, de que están profundamente enamorados. James no dejó de abrazar a su mujer por los hombros durante casi todo el paseo, inclinándose para besarla con cariño en varias ocasiones. En su mano izquierda, se puede ver reluciente su alianza de recién casada. Unas románticas instantáneas que marcan los primeros días de andadura en común de esta pareja.
Su boda no fue una gran celebración y es que la intérprete prefirió casarse rodeada sólo por sus familiares más cercanos y amigos íntimos, apenas once invitados. Para la ocasión Keira repitió vestido, un traje palabra de honor con falda tipo tutú que combinó con bailarinas color crema y chaqueta de tweed que ya lució en una fiesta previa a los premios Bafta 2008, de Chanel. “Mis padres llevan juntos 40 años. Se pelean pero se quieren. No sé cómo serán los primeros meses o los primeros años, pero creo que una relación se hace más fuerte a medida que pasan los años y espero poder experimentarlo", aseguró la protagonista de Anna Karenina a la revista Marie Claire. De momento los primeros días parecen maravillosos…
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