El pasado mes de mayo, Keira Knightley confirmaba que se había comprometido con el músico James Righton, aunque ahora ha confesado, en el programa de Ellen DeGeneres, que nunca antes había fantaseado con el día de su boda: “No soy esa clase de chica que sueña con una boda”. Pero el amor puede hacer a la gente cambiar de idea muy rápidamente y cuando su novio le pidió que se casara con ella, no dudó ni un instante en decirle que sí, y ahora intenta organizar su gran día con la ayuda de Internet. "Todavía no hemos planeado nada y todo es bastante aterrador. He buscado en Internet: ‘Si me voy a casar, ¿qué debo hacer?’”, contaba riendo
Todavía no se sabe cuándo es la fecha de la boda de la intérprete de Piratas del Caribe, pero lo que sí está claro es que es una novia que no pierde la sonrisa con los preparativos. Después de decir que todavía no tenía nada preparado y que no sabía por dónde empezar, la actriz comentó a Ellen DeGeneres que, navegando por Internet, había encontrado cosas que desconocía de los preparativos como la Bridal Tea Party, una tradicional fiesta que en algunos lugares se hace para celebrar que una pareja va a pasar por el altar. Entonces, la presentadora no tardó en improvisarle una en el plató y las dos se pusieron una peluca blanca típica del renacimiento y tomaron un té mientras, poniendo un marcado acento inglés, charlaron sobre los próximos proyectos de Keira, además de su paso por el altar.
En este momento la actriz está inmersa en la promoción en Estados Unidos de su última película, Anna Karenina, que protagoniza junto a Jude Law, Aaron Johnson y Matthew Macfadyen. Anoche se estrenó en Hollywood, donde una vez más estaba radiante, y llevó un vestido palabra de honor en tonos verde pastel y azul palabra de honor, que acompañó con la mejor de sus sonrisas. Ahora también se encuentra rodando Jack Ryan, donde comparte cartel con Chris Pine, Kevin Costner y Kenneth Branagh.
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