Domingo de baloncesto en el Palacio de los Deportes de Madrid y caras conocidas en el partido que enfrentaba al Real Madrid con el Blusens Monbus Obradoiro. El equipo blanco firmó su vigésima victoria consecutiva como local por 81-67 ante los gallegos, que intentaron en todo momento poner las cosas difíciles a sus rivales. Los madridistas vencieron en un encuentro que presenciaron en vivo y en directo Helen Lindes, novia de Rudy Fernández, y Amaia Salamanca junto a Rosauro Varo. La modelo fue a animar a su chico y le dio suerte, en vista del resultado obtenido. Rudy, además, estrenaba 'look'. "¡Afeitado que estoy! ¡Noticia!", escribía el jugador en Twitter el viernes, y ayer por fin se dejó ver con su nueva imagen.
Helen no paró de animar al equipo blanco desde las gradas, donde pudimos verla acompañada de unos amigos, entre ellos Amaia y Rosauro. La actriz y su novio se dedicaron continuas miradas y gestos de cariño durante el partido, demostrando así que su relación marcha a las mil maravillas. La pareja está de nuevo en España después de haber pasado una temporada en Nueva York, donde Amaia aprovechó para estudiar interpretación y mejorar su inglés.
La actriz regresó a nuestro país el pasado verano para rodar XP3D, la primera película española de terror en tres dimensiones, y después comenzar a grabar la serie Gran Hotel. Hace diez días, la protagonista de la exitosa serie de Antena 3 acudía a la presentación de la segunda temporada de The Walking Dead, para la que se caracterizó de zombie junto a otros famosos, y revelaba que continuará grabando la serie "hasta el mes de diciembre".
Amaia Salamanca está viviendo no sólo uno de sus mejores momentos profesionales, sino que además en lo personal tampoco se puede quejar ya que su relación con Rosauro marcha viento en popa. Tras conocerse en una fiesta en Ibiza, formaron una de las parejas sorpresa del verano del año pasado y desde entonces no se han separado ni un momento. "Estoy en un momento muy bonito de mi vida", decía ella hace un año. Y hace pocos días, confesaba: “Todo muy bien". Sin duda, la mejor prueba de que lo suyo es mucho más que un romance estival.
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