Hace días informábamos de los muchos planes con los que Angelina Jolie ha mantenido entretenidos a sus hijos este verano. El último, y para celebrar que Maddox cumplía 10 años el viernes, tuvo lugar el sábado. La actriz y su pareja, Brad Pitt, que se encuentran en Londres ya que él rueda en Cornualles la película World War Z, decidieron celebrar el aniversario de su hijo mayor llevándole a él y a sus hermanos Pax, de siete años, Zahara, de seis, y Shiloh, de cinco, a ver el exitoso musical Wicked en el Teatro Apollo.
La familia casi al completo -sólo faltaban los mellizos Knox y Vivienne, demasiado pequeños para disfrutar de este espectáculo- lo pasó en grande con esta obra que se representa en el West End londinense, a juzgar por las sonrisas que se reflejaban en cada uno de sus rostros al abanonar el teatro, todos ellos vestidos de manera informal, y subir al coche en dirección a la casa que Angelina y Brad han alquilado este verano en la exclusiva zona residencial de Richmond, al oeste de Londres.
Según ha apuntado un miembro del reparto de Wicked a la revista US Weekly, todo el reparto se emocionó mucho al saber que la familia Jolie-Pitt se encontraba entre el público -estuvieron sentados junto a la orquesta, rodeados por varios asientos reservados y vacíos. "Se mostraron muy felices y en silencio", ha afirmado la misma fuente. "Los niños parecían estar pasándoselo en grande con el espectáculo". Wicked narra la historia de los primeros años en la vida de las brujas que aparecen en El mago de Oz: Elphaba, la malvada bruja del oeste, y Glinda, la bruja buena del norte.
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