Tras una polémica separación, parece que las relaciones entre Charlie Sheen y su ex esposa, Denise Richards, son mucho mejores que cuando rompieron su matrimonio hace tres años. La pelea por la custodia de las niñas les enfrentó durante meses en los que los cruces de acusaciones fueron constantes. Finalmente en octubre de 2007, la pareja alcanzó un acuerdo.
Ambos disfrutaron de una divertida jornada junto a sus hijas, Sam, de cinco años, y Lola, de cuatro, en el parque de atracciones de Disneyland, en Orlando. De lo más relajado se mostró el actor, en los días previos a que se conozca el fallo judicial que dirá si tendrá, o no, que ir 30 días a prisión por un delito de violencia doméstica contra su actual mujer, Brooke Mueller. El próximo 7 de junio Sheen deberá presentarse en los tribunales que llevan el caso.
Los hechos ocurrieron la madrugada del día de Navidad en Aspen (Colorado). Después de una violenta discusión, su esposa, angustiada, llamó a la Policía tras haber sido amenazada por su marido con un cuchillo, hecho que el actor ha negado. Sheen asegura que él y su esposa se abofetearon mutuamente en una discusión.
Lo cierto es que tras los momentos de confusión iniciales y la pertinente medida de alejamiento interpuesta por el juez, la pareja se reconcilió. Quizás mucho ha tenido que ver la familia que han formado junto a sus mellizos, los pequeños Bob y Max, que hace poco cumplieron un año, y que llenaron de felicidad a sus papás con su llegada, poco después de que contrajeran matrimonio.
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