Angelina Jolie aprovecha los ratos libres entre los rodajes para dedicarle todo su tiempo a sus hijos. La protagonista de Tomb Raider da prioridad, ante todo, a su papel de madre y no le importa dejarse ver recién levantada y sin una gota de maquillaje en los balcones del palacio en el que se está alojando con su familia en Venecia. La actriz, junto a una cuidadora, quiso enseñar a sus mellizos, Knox y Vivienne, algunos de los rincones más emblemáticos de la Ciudad de los Canales aprovechando las magníficas vistas de su impresionante hogar italiano.
Angelina tuvo que repartir mimos y atenciones a partes iguales ya que ambos querían estar en sus brazos. La pequeña Vivienne no dudó en expresar su queja con su llanto, consiguiendo así que la consolara su madre. Y es que durante esta semana los benjamines de la familia Pitt-Jolie han echado de menos a su padre. Brad Pitt , que se ha ausentado durante unos días por motivos de trabajo.
El actor ha viajado a Londres para asistir a la presentación de la película Kick-Ass, de la que es uno de los productores. Dirigida por Matthew Vaughn y con Nicolas Cage entre los actores que forman el reparto, Kick-Ass está basada en el cómic del guionista Mark Millar y el dibujante John Romita Jr. y cuenta la historia de un joven que sueña con convertirse en un superhéroe.
En esta ocasión, su pareja no pudo acompañarlo por encontrarse rodando su nuevo filme en Venecia, una historia de espías en la que comparte protagonismo con Johnny Deep.
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