Como dice la canción ‘Sevilla tiene un color especial’ y más en estos días que cuenta con la presencia grandes estrellas del Séptimo Arte. Tom Cruise y Cameron Díaz continúan el rodaje de Knigth & Day en la capital hispalense. La pareja de actores se tomó un respiro y disfrutó del partido de la Liga de Campeones entre el Sevilla y el Glasgow Rangers en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán.
Los actores fueron invitados por José María del Nido, el presidente del equipo sevillista. Tom Cruise llegó al estadio de la mano de su mujer, Katie Holmes, que se desplazó hasta Sevilla con su hija Suri y Bella, la hija de Tom Cruise y Nicole Kidman. Cruise saludó amablemente a todos los curiosos que se agolparon en la puerta para verle en persona. Suri se quedó en el hote Alfonso XIIl, con alguno de los doce asistentes que tiene el actor a su cargo durante su estancia en la capital hispalense.
Algo más tarde y por separado llegaba Cameron Díaz, que compartió el palco de honor al lado de su partenaire en la película y Katie Holmes. Los tres fueron obsequiados con varios regalos, entre ellos una camiseta del equipo sevillano. Las miradas de los espectadores se centraron más en el palco para ver a las estrellas de Hollywood, que en el propio campo. Tom Cruise, que es un gran aficionado al fútbol, se lo pasó estupendamente, animando y aplaudiendo al equipo. Gran amigo de David Beckham, el actor norteamericano ya visitó en alguna ocasión al Santiago Bernabeu para ver jugar a su amigo e incluso en Los Ángeles. Su amistad es tan estrecha que Cruise ayudó a Beckham a instalarse en Estados Unidos.
Horas antes del encuentro y mientras Tom continuaba el rodaje del filme, Katie y la pequeña Suri causaban expectación por las calles de Sevilla. Madre e hija se divirtieron en el zoológico de la localidad sevillana de Guillena, que abrió sus puertas especialmente para ellas rodeado de estrictas medidas de seguridad