No corren buenos tiempos para el entorno de David Hasselhoff. El protagonista de El coche fantástico tuvo que ser hospitalizado el pasado fin de semana en el centro Cedars Sinai de Los Ángeles, aunque por el momento se desconocen los motivos de su ingreso. Una ambulancia llegaba el pasado viernes a su casa de Encino, en California, donde le practicaron los primeros auxilios y poco después le trasladaron al hospital. Su representante no ha querido precisar las causas, pero ha negado que haya sido por intoxicación etílica: “David está en casa y está bien”.
Por si fuera poco, la ex mujer del actor y madre de sus dos hijas, Pamela Bach, de 46 años, también se ha visto inmiscuida en serios problemas este fin de semana de Acción de Gracias. Bach fue detenida por conducir bajo los efectos del alcohol cerca del boulevard Laurel Canyon en Los Ángeles y conducida a la cárcel de Van Nuys, donde horas más tarde era liberada tras supuestamente pagar una fianza de 15.000 dólares. “Estoy arrepentida y avergonzada. Atravieso tiempos realmente difíciles entre David que está en el hospital y nuestro divorcio”, señalaba tras ser detenida.
No es la primera vez que es arrestada por un delito de esta índole, es considerada reincidente y tendrá que presentarse ante el juzgado el próximo 24 de diciembre. Horas más tarde era su representante quien enviaba una nota en la que decía: “No hubo fianza. Ella está bien y fue recogida trasladada a su casa por un amigo”.