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Todo el que es alguien en el firmamento hollywoodiense estaba anoche invitado a la fiesta del 30º aniversario del Museo de Arte Contemporáneo de Los Ángeles. Aunque entre todos los asistentes destacó la pareja formada por Brad Pitt y Angelina Jolie. La actriz estaba impresionante con un vestido negro muy parecido al que llevó en la última edición de los Oscar y su novio combinó a la perfección el esmoquin con su barba a lo Jack Sparrow. El modelo de Angelina, con escote strapless estaba firmado por Giorgio Armani, mientras que Brad fue fiel a uno de sus diseñadores favoritos, Tom Ford.
Felices y relajados volvieron a demostrar que su relación va viento en popa y por una noche dejaron a sus seis hijos en casa para disfrutar de una exclusiva visita a este fantástico museo. Además, coincidieron con muchos compañeros de profesión como las bellas Jessica Alba, Marisa Tomei, Christina Ricci, Kate Beckinsale y Eva Mendes.
También hubo galanes destacados en esta glamourosa velada. Impecables, Chris O'Donnell y Pierce Brosnan dejaron sin aliento a más de una. Aunque ellos se encargaron de dejar bien claro que sus corazones están ocupados por sus respectivas esposas, Keely Shaye Smith y Caroline Fentress. Tampoco quisieron perderse el evento el matrimonio formado por los músicos Gavin Rossdale y Gwen Stefani, así como Dasha Zhukova, la embarazadísima novia del magnate ruso Roman Abramovich, a quien ya se le notan sus curvas de futura mamá.
La camaleónica cantante Lady Gaga fue la encargada de poner música a la noche tocando un llamativo piano rosa, estampado con mariposas azules. Testigos de su espectáculo fueron el ex marido de Madonna, Guy Richie, y las actrices Kate Bosworth y Chlöe Sevigny, que llamaron la atención por su belleza.
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