“El origen de un pelo bonito y natural empieza siempre por un cuidado adecuado en la ducha”. Esa es la sencilla receta de la que parte el estilista Ben Cooke, colaborador de la firma Herbal Essences -que acaba de renovar su formulación-. Por eso, es importante mimar nuestro cabello al lavarlo, aportándole la hidratación que, según sus características, necesita. Y es que nos lo agradecerá mostrándose mucho más bonito. Te damos tres motivos para que no descuides la nutrición de tu pelo.
1. Adiós encrespamiento. Un pelo bien cuidado está menos encrespado. Cuando el cabello tiene “sed” intenta atrapar la hidratación de donde puede, bien sea de un producto acondicionador o incluso de la atmósfera cuando se está al aire libre. La hidratación que se obtiene de la humedad puede causar encrespamiento como suele ocurrir con los cabellos secos. Si el pelo está sano y bien hidratado, se reduce la posibilidad de que el encrespamiento arruine el peinado.
2. ¡Huele mejor! El cabello perfectamente hidratado irradia mejor el aroma de los productos que usas para cuidarlo. El pelo seco atrae los olores porque la capa externa no está sellada y pulida. Mientras que un pelo bien nutrido tiene una cutícula menos porosa que impide que los olores de la vida diaria se impregnen.
3. Más manejable. El pelo hidratado está suave y lleno de elasticidad, lo que permite crear estilos diferentes y de forma sencilla. Además, el cabello hidratado facilita la rutina diaria puesto que luce natural y bonito tan solo con secarlo al aire y sin necesidad de aplicar aparatos eléctricos.