'Si tengo el pelo teñido, ¿cómo lo cuido?'
Los expertos de H&S resumen los diez consejos básicos para cuidar los pelos coloreados
¿Sabías que las necesidades de un pelo coloreado son algo diferentes a las del resto de cabellos? Algo que deberíamos tener muy en cuenta, pues cada vez son más las mujeres que apuestan por darle una nota de color a su cabello, bien a base de mechas o de tintes. Toma nota de los 10 consejos básicos para mantener un pelo radiante, con la ayuda de los expertos de la frima H&S.
Mima las puntas. Hay que sanearlas frecuentemente, pues cuanto más sano tengas el pelo, más tiempo te durará la coloración. Por ello, es importante visitar la peluquería cada seis semanas.
Frente al sol, protección. Usa protector capilar si te expones al sol. Si proteges tu piel de los efectos del sol, ¿por qué no proteger el cabello? Conviene elegir productos con base de agua y no de aceite, más eficaces para cabellos teñidos.
La mascarilla, una buena aliada. Es fundamental incluir este producto en la rutina de cuidado del cabello, al menos una vez a la semana. ¿La razón? Las mascarillas aumentan el brillo del pelo, por lo que conviene aplicarla sobre el cabello ligeramente humedecido con agua caliente y envolverlo si se puede con una toalla, para que penetre mejor.
Más agua por dentro... El pelo es un reflejo de tu salud. Hidratándote por dentro, lo notarás por fuera, no sólo en la piel, sino también en el cabello; y si éste está más hidratado, el color se mantendrá durante más tiempo.
...Y por fuera. No te olvides de hidratar tu cabello. Además de desde dentro, es importante usar productos que lo hidraten desde fuera, pues el color penetra mejor de la raíz a las puntas y permanece más tiempo como el primer día.
Ojo con los cambios de color frecuentes. Cada vez que te tiñes, estás cambiando la base del color del cabello, por lo que se necesitan más químicos para conseguir el color deseado, y así más se daña. Si quieres cambios de color, prueba a hacerlo de manera gradual: tu pelo te lo agradecerá.
Bien aclarado. Aclara tu pelo siempre que te bañes en el mar o en la piscina. La sal y el cloro pueden secarlo y estropearlo; por eso, no olvides aclararlo tras cada baño, un simple gesto que hará que tu pelo brille aún con más fuerza.
Manos fuera. No te toques mucho el pelo, pues cada vez que lo haces, sin darte cuenta puedes estar dañando la cutícula. Además de ensuciar el pelo con las manos, inconscientemente estarás dañando el cuero cabelludo.
Limita el uso del secador. No uses secadores de pelo siempre que te laves la cabeza. Los secadores, las tenacillas, etc, contribuyen a que esté más poroso y, por tanto, será más difícil mantener el color. Un consejo: cuando te seques el pelo, hazlo boca abajo, para que el calor llegue sólo a la parte de abajo y no al cuero cabelludo.
El champú adecuado. Y, por último, elige un champú que mantenga el color y que se adecue a tu cuero cabelludo. No te preocupes por lavarlo a diario, ya que en un pelo recién lavado siempre luce mejor el color, porque tendrá más brillo.
¿Cómo cuidas tu melena? Comparte tus trucos en nuestro foro de belleza.