¿Por qué no consigo adelgazar?

Por Juan Rallo

por hola.com

¿Por qué no pierdo peso? Es una de las preguntas que, como entrenador, más escucho.

¿Por qué no eres paciente? Esa es la primera respuesta que me viene a la cabeza, aunque me suelo contener. Pero, sin duda, es la más generalizada de las causas que nos alejan de la pérdida de peso y de la vida sana.
El problema es que estamos tan acostumbrados a oír historias milagrosas del tipo “perdí dos kilos en tres días”, o a quedarnos solo con la parte de la historia que nos interesa, por ejemplo, comentar que “Paquita ha perdido diez kilos porque ha dejado de comer pan” y pasar por alto que ha empezado a ir al gimnasio tres días por semana.
Y si nos vamos a un terreno más místico aún como es el de las estrellas se acentúa este fenómeno, todos hemos visto cambios increíbles en internet o hemos oído hablar de la facilidad de ciertos actores para coger y ganar peso, que, además, nos lo venden como si fuera de un día para otro, y no, no es así. Es tal la desinformación en el terreno de la salud que acabamos por ver normal cualquier afirmación que desafía la lógica.


Los cambios importantes necesitan un importante periodo para realizarse. Piénsalo, ¿cómo vas a perder peso más rápido de lo que lo cogiste? No tiene sentido.
Cada kilo ganado requiere aproximadamente 9000 Kcal, en una dieta normal, una mujer, según su tamaño y nivel de actividad, consume unas 1500-2500 Kcal al día, mucho habría que excederse con las comidas para coger un kilo a la semana durante varias semanas consecutivas. Sin embargo, luego queremos perder un par de kilos en 3 días, y es sencillamente imposible, eso son 18000 Kcal, hablando en términos matemáticos, tendríamos que comer 0 Kcal y quemar haciendo ejercicio unas 15.000, que lo siento, pero ni los mismísimos deportistas profesionales en sus días de entrenamiento intenso. Olvídate, no se puede perder toda esa grasa.

Sí, estamos de acuerdo en que nuestro cuerpo puede variar incluso hasta dos kilos de un día para otro, pero eso es una cuestión de líquidos, por ejemplo, si comes más salado tu cuerpo retiene más líquidos, si bebes alcohol, tu cuerpo retiene más líquidos, pero es una variación que no va más allá de un par de días, cuando tu cuerpo recupera el equilibrio, entonces se ve lo que realmente se ha ganado o perdido.
Adelgazar como tal es perder grasa, y los cambios de peso por otros motivos no cuentan. Jamás van a ser ni sanos ni permanentes.

La solución: dejemos de pensar en bajar kilos en plural y pensemos en cada kilo, de manera individual, como una pequeña batalla y un gran logro.
Yo con mis pacientes veo los kilos de uno en uno, de manera que ver un kilo menos en la báscula sea un gran logro, y que difícilmente se repetirá hasta dentro de unos 10 días, en efecto, hablo de perder un kilo cada 10 días, y ese es un buen ritmo de pérdida.
Sí, yo tengo más ganas que tú de que pierdas el peso. Pero no, no hay milagros.