Alimentando la piel

por hola.com
La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo y refleja la carencia de vitaminas, proteínas o minerales. Para mantenerla en forma, sana, bonita y prevenir su envejecimiento prematuro, hay que adoptar una dieta equilibrada, rica en frutas, verduras y proteínas y grasas esenciales. Y es que una Para ello, la dieta debe basarse en:

-Hidratación. Entre litro y medio y dos litros de agua diarios es la cantidad ideal de líquidos que hay que darle a la piel para que se mantenga hidratada. Las altas temperaturas, el estrés, el ejercicio físico o la alta sudoración pueden pedir mayor aporte de líquidos.

-Nutrición. Se consigue tomando alimentos ricos en vitaminas, como las frutas, las verduras o algunos cereales. También ingiriendo ácidos grasos esenciales que se encuentran en el pescado azul y los alimentos ricos en Omega 3.

-Eliminación de toxinas. Para que el intestino funcione adecuadamente hay que evitar el estreñimiento y deshacerse de todas las impurezas de nuestro cuerpo y nuestra piel con alimentos como las ciruelas pasas, los kiwis o los cereales integrales.

El mejor modo de alimentar la piel es combinando unos nutrientes con otros para tenerla perfectamente nutrida. Por eso es importante ingerir:
-Fruta. Aporta vitamina C, provitamina A, fibra, minerales y distintos antioxidantes. Para que mantenga sus propiedades es importante que se opte por fruta fresca y que se almacene en casa el menor tiempo posible. La vitamina C es básica para la síntesis de colágeno y para el buen mantenimiento del manto hidrolipídico de la piel.

-Verdura y hortalizas. Tienen fibra, vitaminas, antioxidantes y minerales, además, de aportar pocas calorías. El ácido fólico, muy abundante en las verduras es fundamental para la piel.

-Carne y huevos. Las grasas que aportan son perjudiciales para la piel porque potencian moléculas proinflamatorias, pero sus proteínas son necesarias para evitar la pérdida del tono muscular del rostro.

-Pescado. El pescado azul contiene grasas poliinsaturadas, ácidos Omega 2, minerales y vitamina A que mantienen a la piel con un estado muy saludable.

-Arroces y legumbres. Los arroces contienen vitamina B y, las legumbres, una cantidad elevada de fibra, antioxidantes y minerales como el calcio, el magnesio y el hierro. Estos alimentos ayudan a depurar las toxinas de la piel.

-Frutos secos. Aportan vitamina E, grasas poliinsaturadas y calcio. Almendras, avellanas, nueces, piñones... son alimentos muy saludables que cumplen la misma función que los dulces, dotando al organismo de energías y minerales, pero son menos perjudiciales para la salud.

-Lácteos. Las grasas que poseen son saturadas y aunque estas no son muy recomendables para la piel, también tienen altas dosis de vitamina A. Por eso se aconseja tomar estos productos desnatados, semicurados o light.