Entrenar en casa

El entrenamiento en casa es un valor en alza ya que cada vez tenemos menos tiempo para cuidarnos

by hola.com

Sí, estamos de acuerdo en que salir a hacer ejercicio en espacios abiertos y respirando aire puro es de lo mejor que podemos hacer, si tienes la ocasión no la desperdicies.

Si por el contrario no dispones del tiempo y el espacio que el entrenamiento al aire libre requiere, puedes completarlo con una serie de ejercicios en el gimnasio, o, ¿por qué no?, en casa.

El entrenamiento en casa es un valor en alza desde el momento en que cada vez tenemos menos tiempo reservado para las actividades deportivas y también porque los medios de los que disponemos son cada vez mejores.

Hace no muchos años, no podíamos recurrir más que a un juego de mancuernas y los 4 ejercicios que venían en su hoja de instrucciones, una colchoneta en la que hacer algún abdominal y poco más.

Además, el enfoque que se ha dado históricamente a entrenar en casa no ha ayudado mucho. Digo esto porque en los medios, tanto en los programas de salud de la mañana como en algunas revistas, la sección de fitness se limita a mostrar un par de ejercicios de manera rápida, incluso usando como material un par de botellas de un kilo, y tú y yo sabemos que eso no es entrenar. Si queremos hablar de entrenar tenemos que hablar hacer ejercicio de intensidad igual al que hacemos en el gimnasio o al aire libre, eso sí es entrenar.

Para entrenar en casa como en el gimnasio, lo primero es ponerse la vestimenta adecuada, de pies a cabeza. Ese es el primer indicio de que se hacen las cosas bien. A partir de ese momento podemos optar por varios tipos de entrenamiento que vamos a valorar:

1) El DVD
La cosa ha cambiado, aunque también a nosotros sea lo primero que nos vienen a la cabeza, ya no estamos hablando de vídeos como los de Jane Fonda. Los DVDs de entrenamiento han mejorado mucho. Además de los de toda la vida, con una clase suelta, hay programas específicos de varias sesiones, algunos de hasta 3 meses de duración con un vídeo diferente diario. Los puedes elegir con baile sin baile, que requieran material y que no, un sinfín de modalidades que te pueden ayudar mucho a mejorar tu aspecto en casa.

La empresa más fuerte del mundo es Beachbody.com, y en su web podrás encontrar infinidad de vídeos, hay otras, pero esta es la que marca el rumbo del mercado.

A favor: Son muy visuales y motivadores, además de que te ofrecen planes de nutrición y pruebas para que te vayas midiendo. En la mayoría de ellos no necesitas material. Realizan un trabajo equilibrado entre tonificación y cardio.

En contra: solo los encontrarás en inglés. El nivel es muy alto y no discrimina entre principiantes y expertos, francamente es muy exigente, para mi gusto demasiado.

2) Consolas y videojuegos 
Las consolas están a medio camino entre el juego y el entrenamiento. Eso ya hace que las miremos con cierto escepticismo. Es cierto que cada vez van a más, y mejoran los programas de entrenamiento en cada nueva versión. En ellas puedes hacer yoga, puedes bailar, y simular cualquier tipo de deporte, pero en esencia es eso, simular. Cada vez hay más variedad y algunos de ellos ya alcanzan ritmos de entrenamiento altos, como los juegos de Zumba (actividad de la que ya hemos hablado en esta sección), que están disponibles para casi todas las consolas. Sin embargo, los planes de entrenamiento para consolas tienden a acabar en el fondo del cajón y es que tienen algo que no engancha. Bien porque aburren, son repetitivos o sencillamente porque no notamos resultados.

A favor: La diversión, jugar con amigos puede ser muy divertido.

En contra: El precio, tienes que hacer el desembolso por la consola y también por el juego, generalmente bastante altos. Poca variedad en los ejercicios, pues acaban siempre siendo lo mismo y poca efectividad.

3) Internet
Es sin duda la herramienta que está ganando en esta carrera, por lógica, simplemente al alcance de un click tienes millones de vídeos de entrenamiento de todo tipo, hechos por profesionales, por amateurs, largos, cortos, de todas las disciplinas, con o sin material, en resumen, todo.

El problema de la red es precisamente ese, que hay demasiado y no sabemos bien donde buscar. Youtube es un nido de vídeos, pero todos cortos y con una calidad relativa, si eres experto vienen muy bien para buscar, conocer o ver novedades, pero si estás iniciándote puede ser que te equivoques con la elección de vídeos.

Dentro de la red, recomiendo:

a) Para las que estáis más en forma, bodyrock.tv os impresionará el trabajo que hace esta mujer, es un nivel muy exigente.

b) Para las que empezáis os recomiendo webs más didácticas, como tuotrogimnasio.com, donde encontrarás las mismas clases que en el gimnasio, pilates, gap… pero con un ritmo más tranquilo y una duración de 30 minutos.
Una vez completado este mes de pruebas, hemos sacado varias conclusiones, por un lado entrenar en casa ayuda a ahorrar mucho tiempo y dinero, pues evitas transportes y sus gastos, cuotas de gimnasios, las típicas bebidas después del entrenamiento, etc. 

A favor: La ventaja es que en cualquier hueco del día puedes hacer media horita de entrenamiento, mientras se hornea un plato o mientras esperas a que te llegue cualquier pedido, esperando lavadoras, a que te llegue un mail.. etc.

En contra: El contratiempo más difícil de vencer a la hora de entrenar en casa es el de “ponerse a ello”, al saber que luego puedes hacerlo, lo vas retrasando y muchas veces llega la noche y tienes los deberes por hacer.

En cualquier caso, siempre es bueno tener un juego de mancuernas, una colchoneta y alguna banda elástica para poder entrenar en casa, incluso aunque lo hagamos habitualmente en el gimnasio o al aire libre, puedes completar tus días de entrenamiento si llega el fin de semana y te falta alguna sesión, o si se te complica una jornada laboral y no llegas a tu clase del gimnasio.

La valoración de entrenar en casa es que es un perfecto complemento para el entrenamiento en el gimnasio o al aire libre, y solo si eres muy disciplinada, deberías recurrir al ejercicio doméstico como tu primera opción.

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