Este verano, ponle freno al sudor excesivo
Nuestra experta Meritxell Martí nos da las claves para intentar combatir la hiperhidrosis, que se incrementa en los meses de verano
Un sentimiento incómodo por tener que dar la mano, temor a manchar la ropa, no poder utilizar algunos tipos de calzado... si padeces hiperhidrosis sabes de lo que te hablamos. Tras esta palabra se esconde una afección en la que se suda en exceso, un problema que puede verse incrementado en los meses de verano, debido a que el calor es un factor determinante. Pero lo cierto es que muchas personas sufren este problema en cualquier época del año.
Tal y como nos explica nuestra colaboradora Meritxell Martí, propietaria de la Farmacia Meritxell, suele ocurrir por un fallo del sistema nervioso autónomo, que la regula. Puede darse en axilas, pies, manos o la cara, aunque realmente puede suceder en todo el cuerpo, ya que se tienen glándulas sudoríparas repartidas en la piel por todo el cuerpo.
¿Cuáles son las causas?
-Factores externos: como el calor.
-Factores endógenos: ejercicio excesivo, alteraciones como nervios, vergüenza, enfado o ansiedad; puede ser un problema hereditario; por enfermedades, como parkinson, o traumatismos cerebrales que provoquen este problema; por alcoholemia; hipertiroidismo; diabetes; problemas cardiacos; algunos fármacos como antidepresivos, para la enfermedad de alzheimer; menopausia; obesidad...
No es necesariamente obligatorio que suden todas las partes del cuerpo a la vez, algunas veces sólo sudan en exceso una o dos partes del cuerpo, como pueden ser las palmas de la mano, los pies, las axilas o la frente.
Tampoco tienen por qué ser algo continuado, puede ser sólo en unas horas y no a diario, en las horas de sueño o durante el día. Puede ocurrir incluso aunque se esté en reposo.
¿Cuáles son las consecuencias?
-Se encuentran continuamente mojados, mojando la ropa, los zapatos o el pelo, con la incomodidad que esto supone.
-Esta sudoración puede irritar la piel y provocar infecciones, es muy habitual en personas obesas que el exceso de sudoración provoque llagas e irritación en zonas como entre las piernas o debajo del pecho.
-Dificulta el trato con las personas. Por ejemplo, el hecho de dar la mano, por incomodidad, vergüenza o inseguridad personal, incluso la utilización de objetos como abrir botellas, escribir aguantando los bolígrafos u objetos simples como los pomos de las puertas.
-Olor corporal. Este olor corporal depende de la alimentación de la persona y si esta tomando o no algún medicamento, o alimentos como espárragos, cebolla, ajo y algunas especias. Aunque realmente este olor es debido de la combinación de las bacterias con el sudor, que provoca una fermentación y, por ello, mal olor. Cuando se sufre mal olor corporal a causa del sudor, lo llamamos bromhidrosis.
¿Qué podemos hacer?
Hay algunos factores que pueden evitarse y que van a disminuir el exceso de sudoración.
-Conviene evitar el alcohol, las bebidas con cafeína, el calor y los picantes.
-Antitranspirantes. No es lo mismo un anti-transpirante que va a regular la transpiración que un desodorante que va a ayudar a disminuir el olor corporal. Se suelen usar estos productos o la combinación de ellos: 10-20% hexahidrato cloruro de aluminio, ácido bórico, talco y polvo de alumbre. Aunque algunas veces puede provocar irritación en la piel dependiendo de la zona que tratar y la concentración de los productos. Son especialmente eficaces en los pies: Es importante la higiene diaria, ya que si hay sudoración excesiva puede provocar especialmente el olor en los pies,por lo que es importante que se laven con agua y con jabón. Se pueden aplicar los polvos antitranspirantes tanto en el zapato como en los pies, que ayudarán además a absorber la humedad. Los zapatos descubiertos en periodo de calor son preferibles a los cerrados. En las zapatillas de deporte se pueden usar plantillas con carbón activo. El sudor excesivo puede provocar la producción de bacterias, y aparición de hongos.
-Fármacos. Como se trata de un problema del sistema nervioso, los anticolinérgicos son los adecuados, sin embargo al ser un tratamiento sistémico no puede distinguir entre efectos secundarios como sequedad de la boca, estreñimiento o visión borrosa, por lo que solo se pueden recomendar puntualmente, especialmente cuando el sudor es muy importante en la cara.
-Toxina botulínica. La toxina botulínica en dosis más elevadas que la usada para tratar las arrugas también es muy efectiva. Se inyecta en las axilas o en palmas de manos o pies, así se evita la llegada de la señal nerviosa a la glándula, aunque el tratamiento es solo durante 6 meses.
-Iontoforesis. Se transmiten pequeñas corrientes eléctricas y con ello se intenta cerrar la glándula sudorípara temporalmente. Se ponen en agua las manos y los pies, y se aplica una ligera corriente eléctrica que se va aumentando progresivamente dando una sensación como de hormigueo. Se debe aplicar durante 10 a 20 minutos, varias veces a la semana, hasta ir reduciendo las sesiones una vez al mes.
-Tratamientos quirúrgicos. Es quizás la opción más radical, que implica seccionar los nervios que envían las señales, aunque puede provocar que aumente la sudoración en otras zonas. Se puede realizar otra operación como es la extirpación quirúrgica de las glándulas sudoríparas de la zona a tratar, esta operación se realiza en las axilas.
-Tatamiento Mira Dry. Es un novedoso tratamiento, específico para la hipersudoración de las axilas. Meritxell Martí afirma que es el tratamiento más eficaz sin necesidad de pasar por la cirugía, ya que es definitivo, se destruyen las glándulas sudoríparas de la axila. Se realiza en el consultorio médico, aunque son actualmente muy pocas las clínicas médicas donde lo hacen, una de ellas Ribé Clinic de Barcelona. Con esta aparatología, se aplica energía microondas sumamente controlada con el fin de disminuir, de manera segura y eficaz, la sudoración en las axilas.
Por lo general, la disminución de la sudoración axilar puede observarse de inmediato después de una sesióny comúnmente se necesitan dos para optimizar los resultados y la duración. En estudios clínicos controlados, entre el 70 y el 90 % de los pacientes vieron reducida su sudoración axilar de manera significativa y prácticamente todos los pacientes lograron una cierta reducción. En un seguimiento a los 12 meses posteriores al procedimiento, los pacientes seguían mostrando una disminución considerable de la sudoración. Al igual que con cualquier otro procedimiento médico, los resultados pueden variar entre pacientes.
Las axilas han de rasurarse antes de aplicarlo, se aplica estirado, y es preferible hacerlo con anestesia local suave. Una vez aplicado en las axilas, da sensacion como de succión, una vez el tratamiento está finalizado, se aplica frío para evitar la posible inflamación , aunque es posible una inflamacion y enrojecimiento transitorio. Este tratamiento dura aproximadamete 60 minutos.