Depilación con cera, ¿cuáles son sus secretos?

No te pierdas nuestros consejos sobre uno de los sistemas de depilación más populares

Por hola.com

Llega el buen tiempo y con él una cita ineludible con la depilación. No hay nada menos femenino que ese vello que aparece cuando menos se lo espera. Y, por eso, es en estos meses cuando debemos esmerarnos en lucir piernas, axilas, ingles y demás zonas problemáticas libres de incómodos y antiestéticos pelitos. Ahora bien, hay muchas opciones para eliminarlos.

La cera es por tradición uno de los más populares sistemas de depilación, y no le faltan razones. La primera es su larga duración, así como su eficacia hasta con el vello más fuerte y rebelde. Como lo arranca de raíz, obliga al folículo piloso a crear un nuevo pelo empezando desde cero, lo que le lleva varias semanas y lo va debilitando con el paso del tiempo. Al cabo de los años, el vello suele salir más débil y fino. Además, al ir creciendo de forma progresiva, el vello no "pincha", como sucede cuando se depila con cuchilla.

¿Caliente o tibia?
La cera caliente fue hasta hace no mucho tiempo el único tipo de cera disponible, pero la tibia se ha impuesto por derecho propio. Sólo alcanza una temperatura ligeramente superior a la del cuerpo, suficiente como para abrir el poro, sin llegar a alterar la circulación ni dañar los capilares, como hace la cera caliente. Aun así, las mujeres que sufren de problemas de circulación harán mejor en optar por la cera fría, menos eficaz con el vello grueso, pero que se adecua perfectamente a las áreas donde es más fino, como el rostro o la línea alba, la que va del pubis al ombligo. Una de sus principales desventajas es el tirón necesario para arrancar el pelo, que algunos médicos desaconsejan en zonas sensibles como axilas o ingles, áreas donde hay ganglios que a la larga podrían llegar a verse afectados por la tracción.

Cómo funciona. Se pega al vello y, al desprenderse mediante un tirón, arranca el pelo de raíz, desde el bulbo piloso
Mucho ojo. Quienes prefieran depilarse con cera sin salir de casa deben tener en cuenta unas precauciones mínimas, pero imprescindibles. Lo más importante es no acercar la cera caliente a nada inflamable, como por ejemplo tejidos acrílicos que puedan fundirse o pegarse a la piel y causar heridas muy, muy graves. ¡Todas las precauciones son pocas!
Inconvenientes. Se produce un "periodo ventana" muy incómodo cuando el vello ya es visible, pero aún no está lo suficientemente largo como para ser arrancado. El tirón puede ser desagradable, o incluso doloroso, según la sensibilidad individual y la fuerza del vello. No se recomienda para zonas de ganglios como axilas o ingles, ya que el tirón no es aconsejable en áreas tan delicadas. No siempre es fácil hacérselo uno mismo en casa.
Zonas recomendadas. es especialmente útil para las piernas.