Acaba la Navidad, y notas cómo tu cuerpo está saturado de comilonas y excesos. Enero marca la vuelta a las buenas costumbres en lo que a comer se refiere, tras una época en la que quien más quien menos hace un paréntesis para disfrutar de las reuniones en torno a la mesa. Y es que estos días de atrás hemos sometido a nuestro cuerpo a un exceso de comida, bebida y toxinas en general que pueden generar consecuencias a nuestra salud e incluso a nuestra belleza.
Para eliminar esas toxinas, dar un respiro a nuestro organismo y depurarlo, en Clínica Ordás recomiendan realizar una dieta detox durante unos días tras las fiestas. “Con esta dieta, conseguiremos reducir volumen, perder los kilos de más, ayudar a nuestro hígado y además potenciaremos la buena calidad de nuestra piel. Existen evidencias de que la restricción calórica ayuda a un mejor envejecimiento de la piel”, asegura Patricia García, nutricionista de la clínica.
¿Qué es exactamente una dieta 'detox'?
La dieta detox clásica es una dieta de limpieza que se centra en restringir la ingesta de grasas animales y aumentar la de vegetales, granos integrales y líquidos. Hay que ingerir aquellos alimentos que permiten que el cuerpo se deshaga de las sustancias químicas nocivas y otras toxinas, para que pueda funcionar en óptimas condiciones.
Así, según esta experta, hay que comenzar por repartir la ingesta diaria en tomas cada 3 horas aproximadamente. Lo ideal es seguir esta dieta unos tres días. No se debe hacer más de una semana porque pueden aparecer déficits nutricionales.
Durante estos días, di SÍ a...
1. Frutas y verduras: preferiblemente las de color verde: alcachofas, espinacas, judía verde, acelga, lechuga, escarola o rojo como el tomate (con gran cantidad de licopeno). Y frutas como la piña, papaya, naranja, manzana, uva o mandarina. Se pueden tomar al natural o en zumos.
2. Hidratos de carbono con fibra. Arroz integral, pasta integral, pan de centeno, cereales, soja, etc…
3. Proteína vegetal. Esta dieta solo tolera el consumo de proteínas vegetales como la soja, el tofu y las legumbres. No conviene tomar ninguna proteína animal.
4. Mucho líquido. Los líquidos son importantes para purificar el organismo, pues ayudan a limpiar los riñones y a que el cuerpo se deshaga de sus desechos.
Y di NO a...
1. Todas las proteínas animales grasas: durante los días de la dieta las proteínas que ingiramos deben ser vegetales, hay que eliminar todas las proteínas animales grasas, incluidas el marisco y el pescado azul, así como todos los productos lácteos. Estos días se puede sustituir la leche por leche de soja, arroz o cebada.
2. Evitar las mantequillas y todas las grasas de origen animal.
3. Eliminar el azúcar refinada, harina blanca, alimentos procesados o precocinados.
4. Nada de alcohol, cafeína ni tabaco.
Además hay que hacer ejercicio moderado y beber aproximadamente unos 2 litros de agua diarios.
¿Quieres un ejemplo práctico de este tipo de dieta para depurar? Toma nota.
Día 1:
Desayuno: 1 kiwi + ½ vaso leche de soja + 1 rebanada de pan integral
½ Mañana: 1 manzana
Comida: Judías verdes rehogadas + filete de pollo a la plancha con ensalada
½ Tarde: 1 yogur de soja
Cena: Alcachofas + tofu
Día 2:
Desayuno: Piña + 2 yogures de soja.
½ Mañana: Papaya
Comida: Lentejas + ensalada
½ Tarde: 1 yogur de soja
Cena: Tortilla de espinacas (sin yemas) + ensalada de tomate
Día3:
Desayuno: 1 naranja + ½ vaso leche de soja + 2 tortas de arroz integral
½ Mañana: 1 yogur de soja
Comida: Pasta integral + filete de pavo
½ Tarde: 2 mandarinas
Cena: Ensalada completa + merluza