Aunque no te lo creas del todo, pues el mal tiempo no parece querer irse, se acercan días de sol y playa, de ropa ligera y de momentos de relax. Días en los que quien más quien menos se expondrá a los rayos del sol, con el objetivo de conseguir ese ¡ya deseado! tono dorado. Pero, una vez más, ese primer baño de sol puede convertirse en un arma de doble filo para nuestra piel y las quemaduras aparecen si olvidamos protegernos adecuadamente, en parte por el deseo que tenemos de disfrutar del sol, especialmente este año. El dermatólogo José Luis López Estebaranz, asesor de la firma L’Oréal, ha contestado a nuestras preguntas para disfrutar de los primeros rayos de forma saludable.
Se acercan las primeras exposiciones al sol, ¿cuál es su recomendación para todas aquellas personas que están deseando disfrutar de los primeros baños de sol?
Moderación. Exponerse de forma progresiva al sol, siempre con un fotoprotector adecuado a nuestro fototipo (tipo de piel) y evitar siempre la quemadura solar. Es fundamental disfrutar del sol con sentido común.
¿Cuáles son los beneficios y perjuicios de la exposición al sol?
El sol es fuente de vida. La luz solar es importante para la síntesis de vitamina D necesaria para nuestro organismo. Sin embargo, un exceso en la exposición solar puede provocar quemaduras solares, aparición de manchas cutáneas o léntigos actínicos, y en personas predispuestas favorecer la aparición de ciertos tumores cutáneos. En todos los casos un exceso de exposición solar acelera el envejecimiento de la piel.
¿Se debe preparar la piel antes de exponerse al sol?
La mejor preparación es el uso de un fotoprotector adecuado.
¿Cuál es el índice de protección solar más adecuado para esos primeros días?
La principal recomendación para las primeras exposiciones solares debemos utilizar un filtro con un índice de protección alto o muy alto.
¿Qué requisitos debe cumplir un buen fotoprotector?
Debe protegernos tanto de los rayos UVB (responsables de las quemaduras solares) como de los UVA (que penetran más profundamente en la piel), deben tener unas características cosméticas adecuadas al tipo de piel, ser no comedogénico, que no provoque reacciones alérgicas y que tenga una alta remanencia en la piel (duración de su efecto).
Si, pese a las recomendaciones, acaban apareciendo quemaduras a causa del sol, ¿qué debemos hacer?
Lo primero dejar de exponernos más al sol. Dependiendo del tipo de quemadura solar bastará con la aplicación de una crema hidratante antiinflamatoria postsolar, un corticoide tópico de mediana potencia o cuidados más específicos en quemaduras más severas o extensas.
En su opinión, ¿deberíamos limitar al máximo la exposición solar o se trata más bien de tomar el sol con cabeza?
En pieles muy claras (fototipos I y II), con múltiples lunares o antecedentes de cáncer de piel sí es imprescindible limitar la exposición solar y utilizar fotoprotectores altos. En todos los casos, el sentido común a la hora de tomar el sol debe guiarnos.
¿Y tú? ¿Qué índice de protección solar utilizas? Comparte tus opiniones en nuestro foro de belleza.