Trucos y consejos para tratar el cutis seco

Aunque suele ser hereditario y constitucional, este tipo de piel es más evidente al llegar a la madurez. ¿Quieres saber cómo cuidarlo?

por hola.com

A medida que vamos cumpliendo años los efectos del paso del tiempo sobre la piel se van haciendo, desgraciadamente, cada vez más evidentes. Y no me estoy refiriendo únicamente a las temidas arrugas, sino también a otra característica muy típica de las pieles maduras: la sequedad cutánea. Y es que, aunque el cutis seco es hereditario y constitucional, suele hacerse más patente al llegar a la madurez.
Si tú sufres de este problema, te habrás dado cuenta que tu piel presenta un aspecto opaco, más pálido y con una descamación muy fina que da la sensación de aspereza al tacto; pues bien, todo ello es debido a que esta tipología de piel presenta una disminución global de las secreciones glandulares y un aumento de la pérdida de agua en las capas superficiales de la epidermis.
A ello hay que añadir, que no sólo tolera muy mal las radiaciones solares, sino que, además, acusa más gravemente el paso del tiempo porque la sequedad extrema de la piel hace disminuir sus propiedades de elasticidad, lo que favorece el envejecimiento prematuro.

Recomendaciones y cuidados
A pesar de todos estos inconvenientes, existen una serie de consejos que pueden paliar y mejorar en gran medida el tratamiento de este tipo de cutis y preservar la juventud de la piel. Toma nota:

  • Te sonará repetitivo, pero es muy importante que lleves una dieta rica en nutrientes y vitaminas, que bebas mucho agua y tengas precaución con determinados climas (demasiado frío o calor...) que pueden dañar la piel.
  • Es aconsejable la utilización de jabones alcalinos, leches limpiadoras y cremas basadas en emulsiones de aceite en agua.
  • Los jabones o geles a base de aceites naturales, como los de coco o avena, así como con Ph neutro son muy buenos.
  • Por la noche, antes de acostarte, realiza una limpieza facial aplicando una leche limpiadora específica para pieles secas y luego una crema nutritiva e hidratante.
  • Es también muy recomendable realizar una exfoliación, porque te ayudará a eliminar las células muertas que obstruyen los poros y las glándulas de la piel, y ésta lucirá más suave e hidratada. Existen diferentes métodos: masajes aplicados con cepillos especiales, frotadores realizados con productos naturales (abedul, almendras...) o mascarillas preparadas con fórmulas para la exfoliación.