'Círculo de Diosas': el ritual de Jennifer Aniston que todas deberíamos copiar
Desde hace 30 años, la actriz se reúne con sus amigas para realizar una curiosa ceremonia cada vez que experimentan un cambio importante en sus vidas
Jennifer Aniston es una apasionada del deporte y en muchas ocasiones ha hablado de la rutina de entrenamiento que practica todas las mañanas antes de que el reloj dé las 12. Su plan de fitness incluye boxeo, spinning, yoga o ejercicios funcionales como su método para tonificar los brazos sin necesidad de usar pesas. Además del físico, la estrella también se centra en cultivar su mente y suele reservar 20 minutos todos los días para meditar. Recientemente, Aniston ha revelado otro de sus métodos para fortalecer su espíritu, un ritual que realiza acompañada de sus mejores amigas desde hace 30 años. Se llama Goddess Circle (Círculo de Diosas) y sirve para despertar la energía femenina.
La californiana se reúne con seis de sus amigas más íntimas, a muchas las conoce desde la adolescencia, y se sientan sobre un cojín en el suelo con las piernas cruzadas formando un círculo. Se reúnen cada vez que a alguna de ellas le ocurre un acontecimiento importante en su vida y se pasan un palo hecho con madera de haya decorado con amuletos y plumas para celebrar nacimientos, matrimonios y otros eventos. ¿El objetivo del ritual? Celebrar el punto vital en el que se encuentran y brindar por una nueva etapa.
Gracias a esta costumbre, estas mujeres se sienten más conectadas unas a otras, celebran la energía femenina que todas ellas poseen y crecen espiritualmente por deternerse y reflexionar sobre el capítulo que comienza en sus respectivas vidas. En el caso de Jennifer, su matrimonio con Brad Pitt, el segundo con Justin Theroux y el momento en el que tuvo que sacrificar a su querida Dolly, su pastor alemán, han sido algunos de los momentos en los que ha necesitado a sus amigas para formar este círculo.
La última vez que se reunieron para celebrar el Goddess Circle fue con motivo del 50 aniversario de Aniston. “Es raro. Existe mucho miedo alrededor de ese número”, explica la actriz a The New York Times, un miedo que ella no siente: “Estoy entrando en uno de los periodos más creativos y plenos de mi vida. De verdad, llevo haciendo esto [actuar] durante 30 años y creo que está a punto de florecer”. Un enfoque positivo del envejecimiento que la celebrity festeja de esta forma tan especial.
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