Jennifer Aniston cumple 50: la verdad sobre su elixir de juventud
La actriz cambia de década con una envidiable forma física y parece que haya detenido el paso del tiempo. ¿Cuál es su secreto?
Hace 50 años nació el que sería uno de los iconos más admirados de Hollywood, Jennifer Aniston. Y tal y como reconoció recientemente en el programa estadounidense The Ellen Show, se siente fantástica. ¿Cómo ha conseguido que las décadas no pasen por ella? Realmente la actriz siempre ha sido muy realista en cuestión de belleza. No es solo genética, la disciplina es fundamental. Precisamente en esta cita con la pequeña pantalla Jennifer habló sobre su última obsesión fitness, el boxeo, deporte que combina con un programa de ejercicios que practica cinco días a la semana y que incluye yoga, meditación, ejercicios cardiovasculares y de tonificación. Además, en paralelo al entrenamiento, sus hábitos de alimentación han sido determinantes especialmente a partir de los 40.
Superalimentos y platos de origen orgánico
Cuando le preguntaron que cuál era su filosofía a la hora de alimentarse, la estrella contestó a Yahoo! Food: “Es bastante fácil: Comer todos los vegetales y frutas orgánicas que pueda, mantener bajo el consumo de azúcar, beber mucha pero que mucha agua y dormir bien”. Una alimentación que ha sustituido a la dieta de la Zona, con la que llenaba su nevera de comidas preparadas que contenían un tercio de proteínas magras y dos de carbohidratos y vegetales con bajo índice glucémico (azúcares). “Ya no me pongo reglas”, declara Jennifer, quien sí que desayuna religiosamente un smoothie a base de leche de almendras, cacao puro, frutas antioxidantes, maca y proteína en polvo de origen vegano.
Ejercicio también para la autoestima
Hace poco más de un año que la estrella descubrió el boxeo y se declara una apasionada de la disciplina que practica junto a su entrenador Leyon Azubuike; el experto declaró a People que Jennifer es una atleta por naturaleza: “Está preparada para entrenar duro todas y cada una de las veces que pisa el gimnasio. No importa que sea para una sesión de 45 minutos o una de dos horas, siempre está preparada para darlo todo”. Además de liberar estrés, mejorar el equilibrio y la autoestima o tonificar los músculos, tan solo en una clase se pueden llegar a quemar hasta 600 calorías.
El eterno look californiano
Con mínimas variaciones, Jennifer ha llevado el mismo corte de pelo iluminado con reflejos dorados desde hace al menos dos décadas. Las mismas en las que su personaje, Rachel Green, la encumbró. El desfilado de los mechones frontales es uno de sus secretos para enmarcar las facciones y estilizarlas; el trabajo de coloración, una forma de suavizar e iluminar el rostro. En cuanto al maquillaje, embellecer sus rasgos de forma natural ha sido la filosofía de belleza de la actriz desde el principio de su carrera: utiliza barras de labios en colores nude, es incondicional a un cosmético de 27 euros, a la máscara de pestañas para dar profundidad a su mirada y a su eterno bronceado logra su aspecto lleno de frescura y naturalidad.
Entrena cuerpo y mente
Aniston lleva muchos años practicando yoga, la disciplina originaria de La India que trabaja cuerpo y mente a través de posturas (asanas) unidas a la respiración. A veces lo combina con el spinning, una práctica muy habitual en la que se consiguen los beneficios de ambos: quemar calorías, tonificar los músculos y reducir los niveles de estrés. Aparte de su afición por el yoga, la intérprete es una gran abanderada de la meditación que practica nada más levantarse como declaró a Popsugar: “Baja tus niveles de estrés y te encuentras interactuado con el mundo de una forma más fácil, mejor y más tranquila”.