Los errores de maquillaje que casi todas cometemos en verano
Loss expertos revelan cuáles son los productos, texturas y colores que debemos evitar durante los meses de calor
La estación en la que suben las temperaturas es el momento clave para replantearse por completo el neceser de maquillaje: el tono de base que se ha utilizado durante todo el invierno ya no complementa al recién estrenado bronceado, los polvos ‘efecto buena cara’ de los meses anteriores necesitan un poco más de intensidad y se debe subir el filtro del protector solar para combatir los efectos dañinos del sol. Aunque estos son los cambios más obvios, existen texturas, colores y gestos que deben evitarse a lo largo de toda la época estival para lograr un maquillaje natural y favorecedor. Eliecer Prince, National Make Up Artist de Guerlain, y José Belmonte, experto de maquillaje de L’Oréal Paris, nos explican los errores típicos de los que huir cuando cojamos las brochas estas vacaciones.
1. Elegir bases de maquillaje demasiado densas
“Creo que el error más típico en los maquillajes en época de verano es la elección de la textura y la cantidad. En verano debemos aprovechar más nuestra piel, es decir, cubrir menos y dejar ver más”, así comienza Belmonte a señalar una de las equivocaciones más frecuentes, “el exceso de producto es incompatible con el calor”. En cuanto a la textura, Prince tiene claro que los geles son los que mejor funcionan: “La textura crema es la menos acertada porque es más densa y con la humedad es desaconsejable”.
2. Aplicar el tono incorrecto de bronceador en el lugar equivocado
“Subir demasiado el tono del maquillaje para aparentar que estamos más morenas es un error muy habitual y nada favorecedor. Si ya tenemos color, utilizar sólo los Terracotta Light de Guerlain para sublimar el bronceado. Y nunca elegir un tono demasiado oscuro, eso nos envejecerá”, explica Eliecer, lo correcto sería elegir un producto uno o dos tonos más intensos que el propio para lograr un resultado natural. Además, la forma de aplicarlo que también afecta al acabado es comenzar por la frente como revela Belmonte: “Estamos apagando un punto de luz que es muy importante. Debemos llevar el bronceado hacia sienes y contornos del rostro”.
3. Olvidar las fórmulas ‘waterproof’
Están específicamente formuladas para aguantar el agua y la humedad, por eso son las más indicadas para las que quieren llevar maquillaje a la playa, piscina o a lugares con climas húmedos. Además del eyeliner o la máscara de pestañas, Jose Belmonte asegura que es posible dar un poco de calidez al rostro en estas situaciones: “Si queremos dar ciertos toques de color, utilizar sombras y coloretes en crema y, para cubrir algunas zonas de nuestra piel, el fondo de maquillaje Infalible 24H de L’Oréal Paris es perfecto”, eso sí, siempre utilizando poca cantidad de producto.
4. Utilizar los mismos colores que en invierno
Aunque la magia del maquillaje radica en que cada persona puede experimentar con las texturas, colores y acabados que más le inspiren, existen ciertos tonos que no suelen favorecer a las pieles morenas: “El blanco no se debe utilizar ni en sombras, ni en iluminadores ni en labios. Se deben utilizar ocres, dorados para sublimar el bronceado”, nos dice Eliecer Prince, y continúa aconsejando que lo mejor es olvidarse del negro: “Un ojo ahumado en verano en tonalidades oscuras (negro, verde demasiado intenso, grises) no es favorecedor porque nos dará un aspecto más apagado y cansado”. Belmonte añade que los corales o rojizos conviene evitarlos si el moreno tira a rojo ya que se acentuará la intensidad de ese tono.
5. Hidratar en exceso
Sin duda, el calor y el sol típicos del verano exigen aumentar las dosis de hidratación tanto bebiendo agua como con cosméticos que consigan evitar la pérdida de ella pero, según nuestro experto de Guerlain, no se debe exagerar la aplicación de este tipo de cuidados si se va a maquillar después: “El exceso de hidratación lleva a que el maquillaje resbale, no fije bien y que el rostro brille demasiado (no es el glow que buscamos) y da un aspecto sucio y cansado”. Y aunque para intensificar ese glow los iluminadores sean el producto ideal para conseguirlo, Jose advierte que no debe utilizarse en zonas con muchas líneas de expresión ya que acentuaría su aspecto.