TRX, artes marciales y dieta vegana: así se preparó Scarlett Johansson para su papel más exigente
La actriz, de 33 años, ha vuelto a meterse en la piel de la Viuda Negra para la última entrega de Marvel, 'Vengadores: Infinity War'
El pasado mes de abril, Scarlett Johansson presentó la última entrega del universo de Marvel, Vengadores: Infinity War y, tal y como sucedió en las anteriores películas, la actriz estadounidense ha tenido que prepararse a conciencia para meterse en la piel de la Viuda Negra: una espía rusa con una increíble condición atlética, además de experta en armas y artes marciales. Sin duda, ha sido su papel más exigente y ha requerido no solo de mucho esfuerzo y muchas horas de gimnasio, sino también de una alimentación estricta. Así lo ha confesado el que fuera su entrenador, Bobby Strom, que ha desvelado cómo fue el plan de entrenamiento que diseñó para la actriz, de 33 años.
Perder grasa y ganar músculo fueron los objetivos principales, ya que Scarlett debía tener una condición física perfecta para estar a la altura de su personaje y poder aguantar los duros rodajes de todas las escenas sin problema. Para ello, tal y como publica el portal de noticias PopSugar, a la semana realizaba varios circuitos de entrenamientos durante 90 minutos. Incluían un sistema de cables de TRX, bandas de resistencia, balones medicinales y pesas, convirtiéndose en la combinación perfecta para quemar grasa y ganar fuerza, ya que aumentaba su ritmo cardiaco levantando más de su peso corporal. Bobby también le dio mucha importancia al cardio y lo incluía en sus rutinas de ejercicios.
Para meterse en la piel de la Viuda Negra, Johansson tuvo que aprender a dominar las artes marciales y a defenderse en el cuerpo a cuerpo, por lo que convertirse en una luchadora profesional fue otro de sus objetivos. La que hacía de su doble en Los Vengadores, Heidi Moneymaker, confesó en una entrevista con Shape que la actriz no tenía miedo a nada y que quiso hacer la mayor parte de las escenas, a pesar de que había complicada peleas. "Aprovechaba cualquier momento que tenía libre para colarse en una sesión de entrenamiento (...) También fue entrenada con armas. En la película tuvo muchas peleas, en algunas luchaba solo contra una persona pero en otras se enfrentaba a muchas", afirmó.
Por si todo eso fuera poco, Strom confiesa que la actriz completó su entrenamiento siguiendo una dieta "mayoritariamente vegana" cuando entrenaba para las primeras películas de Los Vengadores, así que es probable que para el rodaje de esta nueva entrega haya seguido los mismos hábitos alimentarios. Su entrenador asegura que hacía pequeñas comidas repartidas durante todo el día, centrándose sobre todo en harina de avena, frutas y verduras frescas, ensaladas y proteínas magras. Al parecer, uno de los alimentos favoritos de Scarlett era el queso, pero aseguró al periódico británico Daily Mail que ya no lo come, sino que... ¡solo lo huele! "No lo como más porque mi cuerpo está mejor sin él", dijo.