¿Alguna vez has pensado cuáles son los cuidados que siguen los odontólogos o cada cuánto se someten a un blanqueamiento dental? Hemos querido confirmar con los propios expertos sobre el protocolo de los dientes más blancos, tanto en consulta como en casa, para averiguar qué claves hay que seguir. Te las contamos.
El dentífrico y el blanqueamiento ✓
Por su parte, Jaime Jiménez, director general de la Clinica Ciro, apunta que el secreto de los odontólogos para tener los dientes blancos gira entorno a tres puntos básicos.
-El primero sería utilizar pastas de dientes mínimo tres veces al día con activos blanqueadores. Esas pastas llevan unos principios especiales para blanquear los dientes (aunque sea de una forma superficial).
-En segundo lugar, llevar a cabo blanqueamientos en la clínica, que se pueden realizar aproximadamente una vez al año. Lo importante es que el blanqueamiento sea individualizado para cada paciente, porque no todos los dientes son iguales, ni todos los blanqueamientos tienen los mismos principios activos. Por eso, hay que saber cuál es el indicado para ese tipo de diente y de paciente.
-Y por último, es muy importante la dieta, que ha de ser saludable para el color del diente. Para eso hay que evitar café, té, remolacha… todo lo que contenga cafeína, teína, además de componentes oscuros, como el vino tinto. Y, sin duda, es fundamental evitar hábitos como puede ser el tabaco, ya que hace que se oscurezcan mucho los dientes, especialmente en el caso de los fumadores de puros.
Evitar los remedios caseros ✗
Desde la Clínica Dental Clident, en Sevilla, nos recuerdan por qué hay que evitarlos. La doctora María Salas, argumenta: los trucos caseros de los que se habla o figuran en internet, como el bicarbonato sódico, el limón, el vinagre de manzana... No son recomendables dado que son ácidos que erosionan y dañan el esmalte. Pueden resultar incluso perjudiciales si previamente el paciente ha realizado un tratamiento profesional en la consulta". El tratamiento blanqueante más efectivo incluye una parte en consulta y otra en casa, y en el domicilio lo ideal es seguir siempre las indicaciones de nuestro odontólogo.
La dieta 'blanca', la clave de las sonrisas más bonitas ✓
La doctora Daniela Carraza, odontóloga y codirectora del centro Instituto Profesor Sada, apunta por su parte que, para evitar que el esmalte se amarillee, es recomendable realizarse limpiezas bucales dos veces al año, dejar de fumar así como tener cuidado con el tipo de alimentación para que en el caso de realizarnos un blanqueamiento, este sea duradero en el tiempo. Es importante llevar una dieta “blanca”, evitando alimentos con color, que debe durar por lo menos una semana tras realizar el tratamiento. "Es muy importante evitar alimentos como el tomate, la zanahoria, salsas rojas y chocolate así como bebidas en la que su color pueda influir en un blanqueamiento óptimo, como son el vino tinto, té, café y bebidas refrescantes tipo cola", nos cuenta. "Si tomamos té ó café de manera habitual, nosotros a nuestros pacientes recomendamos que tras su ingesta, beber agua o enjuagarse", explica la doctora Salas, quien recomienda además, un alimento que, además de saludable, puede beneficiar a nuestra sonrisa, la manzana. "Existen alimentos ricos en agua, como por ejemplo la manzana, que es muy buena para mantener los dientes brillantes, ya que estimulan la salivación y el arrastre de los alimentos. De hecho, la saliva lava los dientes y neutraliza los ácidos que erosionan el esmalte. Incluso puede ser beneficioso mascar chicle tras las comidas; aunque nunca como sustituto del cepillado", explica.
Cómo cuidar los dientes en casa después de un blanqueamiento
Los cuidados en casa tras realizar un blanqueamiento en consulta son fundamentales. La doctora Carraza añade otra útil recomendación: “Las tiras Oral B son muy cómodas y nosotros las utilizamos como refuerzo del blanqueamiento ya realizado en clínica, para potenciarlo o en forma de recordatorio unos meses después si el diente se ha perdido el blanco obtenido”. Y por último, hay que tener en cuenta esta advertencia de la doctora Salas, relativa a los enjuagues bucales: "No usar, si no es bajo prescripción, colutorios con clorhexidina, ya que esta tiñe el esmalte; y evitar siempre enjuagues que contengan alcohol".