Cómo retrasar el envejecimiento prematuro de la piel
Está claro que todos tenemos que pasar por él, pero ¿a quién no le gustaría poder retrasar el envejecimiento? Sin embargo, cada día nuestra piel sufre el impacto de numerosos agentes externos que la deterioran, lo cual nos hace preguntarnos: ¿Cómo se puede ralentizar el proceso de envejecimiento?
Para responder a esto, lo primero es entender cómo se forman los signos del envejecimiento, incluso antes de que aparezcan reflejados en nuestra piel. Recuerda bien este concepto: el Exposoma, una noción científica que podemos definir como la suma acumulativa de las influencias medioambientales y de las respuestas biológicas resultantes durante toda la vida, incluyendo el medio ambiente, el estilo de vida y los procesos endógenos. Y, como órgano protector, es la piel la que recibe el impacto directo del Exposoma.
Los signos de la edad no aparecen sólo porque cumplas años. Aparecen porque poco a poco la piel sufre daños invisibles: disminuye el nivel de hidratación, se debilita la función barrera y se acumulan los daños oxidativos. La piel actúa como barrera, además de ante las agresiones provocadas por el estrés, frente las medioambientales como los rayos UV. Y el 80% de los signos de la edad se deben a la exposición a rayos UV, de modo que los filtros UV son indispensables para limitar su impacto en el envejecimiento prematuro de la piel.
"La piel es el órgano que protege nuestro organismo: la piel refleja nuestro ambiente, nuestro estilo de vida y nuestras emociones. La radiación UVA, especialmente la UVA larga, la polución, la dieta, el estrés, etc., impactan en nuestra piel, acelerando el proceso de envejecimiento", nos cuenta Mercedes Abarquero, responsable científica de la marca Vichy. Para evitarlo, es imprescindible cuidar la alimentación y la calidad del sueño, practicar ejercicio con frecuencia y elegir los cosméticos adecuados.
Por eso, Vichy ha estudiado el campo del Exposoma para dar con una solución capaz de retrasar el envejecimiento. Y la ha encontrado. El nuevo Slow Âge es el primer tratamiento de Vichy corrector diario de los signos de la edad en proceso de formación con el poder de tres ingredientes naturales: la raíz de baicalina (con propiedades antioxidantes utilizada en la medicina china desde hace más de 2.000 años), el bífidus derivado de probiótico (refuerza la barrera cutánea y ayuda a disminuir la sensibilidad de la piel) y el agua termal de Vichy, rica en 15 minerales (con propiedades calmantes, fortificantes, reequilibrantes y regeneradoras).
Ideal para mujeres entre 25 y 45 años, los efectos de este producto se sienten desde la primera aplicación: sentirás la piel confortable, flexible y fresca. Al mes de tratamiento, los signos de la edad mejoran. A los dos meses, su apariencia es más suave, saludable y fuerte. ¿A qué esperas para probarlo y sentirte joven?