¡No tengas miedo a sonreír!
Breve guía para presumir de una dentadura radiante
La salud dental es una parte importante que no deberíamos descuidar, pero además, también es una cuestión estética, signo de belleza y juventud. Una correcta higiene dental implica tener nuestros dientes sanos, blancos, y unas encías bien cuidadas, tal y como nos explica nuestra colaboradora Meritxell Martí.
Lo más recomendable es visitar al odontólogo al menos una vez al año. Y es que es importante acudir con el dentista no sólo cuando tengamos algún problema, sino también para tratamientos de higiene bucal. Lo más adecuado es hacerlo 2 veces al año, así podemos prevenir posibles problemas en nuestra dentadura. Cuando se realiza la higiene bucal se elimina el sarro y la placa que nos es imposible eliminar diariamente con nuestros cepillos, sin embargo hay algunos puntos que deberíamos tener en cuenta para preservar nosotros mismos la salud de nuestra boca.
Higiene bucal
Es importante cepillarse los dientes varias veces al día; al levantarnos, antes de acostarnos y después de haber comido.
¿Cómo hacer una correcta higiene bucal en casa?
- Usar un cepillo adecuado a nuestras necesidades.
-Cambiar el cepillo al menos cada 3 meses.
-Cepillar la dentadura al menos durante tres minutos, cepillando la cara externa de los dientes, la cara interna, las muelas y la lengua.
-Usar hilo dental y enjuague bucal.
Algunos consejos
-Después de comer debemos esperar 10 minutos para lavarnos los dientes.
-Si hemos bebido líquidos ácidos como zumos cítricos, es preferible esperar 30 minutos antes de cepillarse los dientes, ya que los residuos podrían dañar el esmalte al cepillarse. El esperar este lapso de tiempo permitirá a la saliva neutralizar estos ácidos.
-Debemos utilizar la cantidad justa de pasta de dientes, ya que usar demasiada no es sinónimo de una mejor limpieza bucal.
-Evita usar pastas abrasivas que pueden rayar el esmalte. Utilizar pastas y enjuagues fluorados evitaran la aparición de caries.
-Las pastas de dientes y enjuagues con carbón activo ayudará a mejorar el problema de halitosis en caso de que se presente.
-Mantener el cepillo limpio evitará la aparición de posibles infecciones
-Limpiar los dientes demasiado a menudo o muy fuertemente puede dañar el esmalte.
Dientes blancos
Un aspecto muy relacionado con la higiene es mantener los dientes blancos, ya que una dentadura blanca es signo de belleza, salud y juventud.
El diente tiene una estructura que va de dentro hacia fuera de la siguiente manera:
-Periodonto: es la parte interna del diente y la que aguanta toda la estructura.
-Pulpa dentaria: es donde se encuentran los nervios y el tejido vascular del diente, es la parte más sensible.
-Dentina: marca el color del diente, junto a la pulpa es igualmente una parte sensible. Posteriormente encontramos el cemento radicular, una capa dura de color amarillento que cubre la dentina.
-Esmalte dental:está formado por hidroxiapatita y proteínas, y es la parte más dura del cuerpo humano, sin embargo el esmalte es translúcido y puede desgastarse, por este motivo se pueden llegar a ver los dientes algo amarillentos, manchados o incluso con aumento de sensibilidad dental. Gracias al flúor, el esmalte se endurece ya que se forma la fluorhidroxiapatita.
El blanco de los dientes
La tonalidad de nuestros dientes depende del color de la dentina y del esmalte. Ya que el esmalte es translúcido, va a depender del grosor del mismo que los dientes se vean más o menos blancos. Además si el esmalte está desgastado o manchado también es un aspecto que marcará el color de nuestra sonrisa.
En realidad, el diente absolutamente blanco no existe, ya que por muy clara que sea la dentina, el blanco no es su color natural. Es por ello que cuando se hace un blanqueamiento o se colocan piezas artificiales muy blancas, se puede llegar a ver un poco extraño y nada estético.
Con la edad el esmalte se afina y deja entrever el color más amarillento de la dentina, es por ello que a medida que nos hacemos mayores los dientes son menos blancos; éste es un motivo importante para preservar el esmalte.
El desgaste del diente se puede producir por el paso de los años; sin embargo, hay algunos consejos que pueden ayudar a impedir este desgaste:
-Evita muchos dulces, éstos producen bacterias que se “comen” el esmalte. Si los comes es importante que después limpies tus dientes.
-Evita los alimentos y las bebidas muy ácidos.
-La falta de hidratación y sequedad bucal impide que la saliva haga su rol de neutralizar los ácidos.
-El reflujo puede estropear el esmalte, ya que no es más que ácido del estómago.
-Las dietas con azúcares no le hacen tampoco ningún bien a tu dentadura.
-Aspirinas y antihistamínicos pueden aumentar la velocidad de erosión del esmalte.
-Cepillarse muy intensamente o con cepillos muy fuertes puede estropear el esmalte.
-Cepillarse muy poco también puede erosionar el esmalte, y cuando éste se adelgaza, la dentina que es amarillenta, se trasparenta y entonces los dientes se ven más amarillos.
No deberíamos olvidar que además de los alimentos hay otras costumbres y sustancias que pueden manchar fácilmente los dientes, como puede ser fumar, una de las causas de más problemas bucales, así como algunos fármacos que pueden alterar la formación del esmalte blanco cuando se es niño e incluso mancharlo de adulto, como por ejemplo algunos antibióticos (entre ellos las tetraciclinas). Otra de las sustancias que puede oscurecer los dientes es la clorhexidina; este antiséptico torna algo grises los dientes, aunque se elimina cuando se deja de usarlo.
Alimentos que pueden manchar los dientes
Todos los alimentos que tienen mucho color, son muy oscuros o muy ácidos pueden manchar los dientes, por lo que deberíamos evitarlos.
-La salsa de tomate puede cambiar la tonalidad de nuestros dientes, sobre todo cuando ésta es algo ácida.
-El curry puede dejar los dientes amarillos si se consume muy frecuentemente.
-El vinagre balsámico, al ser tan oscuro, puede teñir los dientes, sin embargo, al añadirlo a la ensalada en forma de aliño, es mucho más difícil que provoque manchas, ya que sólo el hecho de masticar la lechuga evita que se manchen.
-Moras, frambuesas y arándanos, igualmente tienen un alto contenido en antocianinas que son beneficiosas para la salud, pero a su vez son un fuerte pigmento que puede manchar los dientes aunque sea en zumo, mermelada o la fruta en sí.
-El café, el té (incluyendo el té verde) o las bebidas carbonatadas pueden manchar los dientes, ya sea por su propio color o porque además son bebidas ácidas que erosionan los dientes y provocan que se manchen más fácilmente. El té verde mancha los dientes de color grisáceo y el té negro los deja amarillos.
-El vino tinto, al igual que las bebidas anteriores, puede manchar los dientes no sólo debido a su color, sino también a su acidez; es debido a ésta que se puede instalar mucho más fácilmente la mancha. El vino blanco, que también suele ser ácido, puede manchar igualmente los dientes.
Toma nota para combatir las manchas
-Usar pastas de dientes remineralizadoras del esmalte.
-Aumentar en la dieta ácidos grasos como el aceite de coco.
-La vitamina D y el calcio son esenciales para mantener tus dientes sanos.
-Mascar chicle rico en xilitol (sin azúcar), ayuda a que aumente la segregación de saliva lo que ayuda a neutralizar el ataque bacteriano que provoca la caries.
-Si vamos a comer salsa de tomate o curry, podemos añadir a la comida vegetales de hoja verde, esto produce una película protectora que protege los dientes de las posibles manchas. Algunos alimentos adecuados para ello son el brócoli, la coliflor o el apio. También las manzanas son útiles para evitar esas manchas en los dientes.
-Si comemos frutos rojos, como las moras u otros con alto contenido en pigmentos, es preferible beber algo de agua o tomar algún alimento para neutralizar este color, como puede ser la leche o masticar un chicle con xilitol.
-Para evitar las manchas del café algunas personas recomiendan beberlo con pajita, sin embargo, Meritxell Martí no cree que sea la solución. Si bien este método no es el mejor para evitar este tipo de manchas, puede llegar a ser recomendable solo si acabamos de hacernos un blanqueamiento profesional, donde el esmalte está mucho más sensibilizado y es mucho más fácil que se manche.
-Enjuagar y cepillar los dientes después de haber bebido café o vino tinto.
Algunos alimentos que pueden beneficiarnos
Alimentos fibrosos. Estos ayudan al masticarlos a mejorar la encía y a estimular la secreción de saliva que neutralizará naturalmente los ácidos, evitando la erosión de los dientes y protegiéndolos de las manchas. Un buen ejemplo de este tipo de alimentos son las manzanas.
Las fresas. Se aconseja morder fresas para blanquear los dientes, quizás gracias a su propia composición, sin embargo, las fresas enrojecen las encías y con ello los dientes se ven más blancos. Un consejo ‘DIY’ es masticar fresas con bicarbonato para blanquear los dientes.
Queso curado. Masticarlo puede ayudar a neutralizar y evitar que se manchen los dientes, sobre todo con la combinación de queso curado y el vino tinto, evitaremos en gran medida las manchas. Al igual que la leche, contiene caseína, lo que ayuda a neutralizar la acidez que provoca la proliferación bacteriana.
Nueces. Contienen mucha fibra, lo que beneficia la higiene de los dientes estimulando la producción de saliva y protegiéndolos de la erosión de algunos alimentos que contienen ácidos.
Encías rojas y sanas
Las encías también forman una parte muy importante de la salud bucal y en este caso, unas encías sanas van a mejorar la estética de nuestra boca.
La inflamación, el sangrado y la elevación de la encía son los tres puntos más problemáticos de esta parte de la boca. Asímismo, es importante mantener la encía sana sobre todo para evitar la pérdida de los dientes. Una encía inflamada provocada por exceso de sarro, puede causar halitosis. También si la encía se ve roja, quiere decir que hay una buena circulación sanguínea, por lo que el diente se verá más blanco y la sonrisa más bonita.
Fumar, algunos tratamientos farmacológicos, y una pobre higiene dental son los peligros de unas encías sanas. Una falta de correcta higiene en los dientes provoca que se acumulen sarro y bacterias entre la encía y el diente, causando la inflamación y el sangrado de la misma.
¿Qué alimentos pueden beneficiar la encía?
-Manzanas y zanahorias. Al igual que para los dientes, las manzanas ayudan a eliminar la placa dental en la encía.
-Queso y leche. Es importante la reducción de la acidez y así evitar la proliferación bacteriana y neutralizar la acidez de los alimentos en la boca que provocan la formación de placa.
-Vegetales de hoja verde. Neutralizan igualmente el ácido, ayudan a mejorar la producción de saliva gracias a la acción de la clorofila, la cual es antiséptica natural por lo que evitará la proliferación de bacterias, además de ser antioxidante.
-Pimienta de cayena. Con alto contenido natural de capsicum, estimula la circulación sanguínea en la encía, por lo que tendrá una mejor apariencia, de color sonrosado, y ayudará a disminuir la inflamación de la encía. Una recomendación casera de Mertixell Martí es añadir un poco de pimienta en el cepillo de dientes y cepillar de forma muy suave la encía.
-Cebolla. Tiene una importante acción bactericida.