Los aeropuertos viven sus días más frenéticos. Un ir y venir de pasajeros que recorren el mundo en busca de sus vacaciones. Viajar en avión se ha convertido en algo habitual, y muchas personas disfrutan de sus días de descanso en paraísos lejanos. Por eso, vamos a darte una serie de trucos para que, cuando el avión aterrice, estés lo mejor posible, sobre todo si es un vuelo largo.
-La humedad relativa en la cabina del avión es de un 10%. Es decir, ¡bajísima! Para compensar sus efectos deshidratantes, nada como aplicar una hidratante rica en agua (no en grasa), que potencie la función barrera para retener el agua en la piel.
-Y no sólo hay que hidratarse por fuera, también por dento. Es mejor evitar las bebidas gaseosas (hinchan); el café y el té, que son diuréticos, y mucho menos alcohol, que potencia la deshidratación.
-Si se busca aterrizar guapa, es mejor no maquillarse hasta el final del vuelo. Si ya quieres despegar con buen aspecto, nada como un poquito de crema hidratante con color, algo de colorete, máscara transparente en las pestañas y gloss de labios.
-También tenemos que tener en cuenta nuestro atuendo. La ropa ha de ser amplia. Si es oscura, mejor: en caso de manchas, serán menos notables. Otra opción es llevar una camiseta de repuesto en el bolso de mano. No está de más incluir un chal ligero que pueda salvaguardar de los a veces gélidos aires acondicionados y calcetines de repuesto. Y los zapatos también han de ser amplios: hay que contar con que los pies se hinchan durante el vuelo.
-Un antifaz puede ser un buen aliado si quieres intentar dar una cabezada. La calidad del sueño mejora si los ojos no reciben luz alguna. Quien no quiera que le despierten para comer hará bien en hacérselo saber a la tripulación o poner un papelito que lo indique. Una buena opción para comer en el horario que quiera es llevar unas barritas energéticas o dietéticas y una botellita de agua.
-Las medias de compresión son excelentes para evitar problemas de circulación. Se encuentran tanto en pantys (evitan que se hinchen tanto las piernas) como en calcetines, el formato preferido de los hombres.
-De vez en cuando, has de poner tus piernas en movimiento. Lo mejor para impulsar el retorno venoso es mover el tobillo de abajo arriba, con el gesto con el que se impulsaban antes las viejas máquinas de coser.
-Las mamás lo saben, y una vez que entran en casa, ¡no salen! Hablamos de las toallitas limpiadoras para bebés, buenas aliadas para todo tipo de imprevistos. No está de más llevarlas a mano.
-Al llegar, una ampolla de 'belleza inmediata' de efecto flash ayuda a tener buena cara al instante.