La cruzada contra el cáncer de mama se había convertido en un pilar fundamental de su vida. Y precisamente ha sido el cáncer -en este caso un tumor de ovarios- el que ha acabado con la vida de una luchadora incansable. El lazo rosa que ella misma impulsó, y que hoy es el símbolo mundial de lucha contra la enfermedad, acompañaba casi en cada una de sus apariciones públicas a Evelyn Lauder, en cada rincón del planeta, que se ha recorrido para transmitir su mensaje de esperanza y optimismo a millones de mujeres afectadas por cáncer de mama. Este fin de semana nos ha sorprendido la triste noticia de su fallecimiento, el pasado día 12, en su casa de Manhattan a los 75 años, rodeada por su familia, víctima de las complicaciones de un cáncer de ovarios no genético que le fue detectado en 2007.
El sueño americano
Nacida en 1936 en Viena, su familia tuvo que huir de la capital austríaca por la ocupación nazi. En 1940, la familia se trasladó a Nueva York, donde Evelyn estudió y se graduó en el Hunter College, que pertenedía a la Universidad de Nueva York. Después de licenciarse, trabajó como profesora en un colegio público durante varios años. Fue en su primer año de Universidad cuando conoció a Leonard A. Lauder (hijo de la mítica Estée Lauder), con quien se casó en 1959. Desde ese momento su vida personal y profesional estuvo ligada a esta pequeña empresa cosmética que creció con el paso de los años hasta convertirse en todo un imperio del mundo de la belleza. En Estée Lauder desempeñó muchos roles, hasta llegar a ser Vicepresidenta Corporativa Senior y directora internacional de Desarrollo de Fragancias. Y es que su amor por la jardinería y las flores le sirvió como inspiración en este último campo, llegando a liderar el desarrollo de algunos best seller de la firma, como son Beautiful y Pleasures.
Luchadora incansable
Su cruzada personal contra la enfermedad comenzó en 1989, cuando le fue diagnosticado un cáncer de mama. Fue a partir de ese momento cuando comenzó su particular batalla, que no ha dejado de dar frutos gracias a la labor de la Breast Cancer Research Foundation, que ha recaudado más de 350 millones de dólares desde su creación, destinados a fomentar la investigación sobre la enfermedad. “Juntos somos más fuertes. Juntos podemos hacer más. Juntos podemos encontrar una cura. El tema de nuestra campaña 2011 representa la importancia de la unión para apoyar a amigos y familia en la lucha contra esta terrible enfermedad”, explicaba Evelyn Lauder hace apenas unos meses, con motivo de la última campaña contra la enfermedad llevada a cabo por la firma.
Lloran su pérdida
“Mi madre llevó la antorcha de la herencia de nuestra compañía y los valores que le fueron traspasados por mi abuela, la señora Esteé Lauder”, comentaba William Lauder. “Mi madre y mi padre fueron compañeros de vida y compañeros de negocio. Ellos alimentaron la cultura y desarrollo de la Compañía Estée Lauder y, mientras crecíamos, mi madre fue nuestra brújula y pilar principal. Juntos, mi familia y la compañía, recordaremos siempre la persona maravillosa que era”, apuntaba su hijo.
Las reacciones a su fallecimiento no se han hecho esperar, entre otras la de la modelo y embajadora de la marca en la cruzada contra el cáncer Liz Hurley, tantas veces compañera de Evelyn Lauder en sus iniciativas solidarias, que escribía un mensaje en su cuenta de Twitter: “Descanse en paz mi amiga y mentora Evelyn Lauder. Te echaré mucho de menos. El mundo nunca olvidará tu trabajo en la lucha contra el cáncer de mama”. La también modelo Hilary Rhoda, imagen de Estée Lauder, dejó su mensaje en su cuenta de Twitter, “Estamos muy tristes por la muerte de la señora Evelyn Lauder. Era una mujer extraordinaria y la echaremos mucho de menos. Su legado seguirá vivo”.
Ése es tal vez el mensaje positivo hoy: tanto esfuerzo mereció la pena para miles de afectadas que se han beneficiado y se benefician de cada avance en la investigación. "Su pasión se convirtió en nuestra pasión. Ella nos inspiró a todos, y nosotros continuaremos adelante con su misión para librar el mundo del cáncer de mama", ha declarado el presidente de la compañía Fabrizio Freda. Por eso, y por ella, su fundación seguirá trabajando, y cada mes de octubre volverá a teñirse de rosa.