Conoces sus beneficios para la salud, tan alabados por ser uno de los pilares de la dieta mediterránea, pero tal vez no tienes tan claros sus usos en belleza. De hecho, a lo largo de los siglos, se ha usado no sólo como alimento natural, sino también como ungüento medicinal y como óleo sagrado. Existen recetas caseras que pueden realizarse con su ayuda. Hemos recopilado tres.
- Para tu pelo... El cabello muy seco recupera el brillo y la vitalidad perdidas si se cubre de aceite antes del lavado, extendiéndolo cuidadosamente por medios y largos (evitando raíces), y masajeando mechón a mechón, insistiendo en las puntas.
- ...Tus uñas... Una receta tan mediterránea con ingredientes como el limón y el aceite de oliva mejora de forma inmediata el brillo de las uñas. Tras retirar todo resto de esmalte, frota la superficie de la uña y la cutícula con medio limón, lo que ayuda a eliminar manchas como las de tabaco. Después, sumerge las uñas en unas gotas de aceite templado (¡que no caliente!), haciendo un pequeño masaje sobre las cutículas para ablandarlas. Si deseas aplicar esmalte posteriormente, deberás retirar todo resto de grasa para asegurar su adherencia.
- ...Y tu piel. Cuando la piel del cuerpo está muy seca y necesita una hidratante muy untuosa, puedes enriquecer su fórmula habitual añadiendo unas gotas de aceite de oliva a tu crema de siempre. Eso sí, ¡no te excedas con la cantidad!