Estar en forma a los 20 años no tiene muchos secretos. Sin embargo, a estas edades debemos trabajar para el futuro, de manera que, con la actividad adecuada, mantengamos ese óptimo estado el mayor tiempo posible. Lo importante es buscar deportes que te gusten, de manera que no te tengas que obligar a hacerlos, sino que los practiques por mera diversión.
Cuidado con sobrecargarte
Con 20 años, aunque no lo creas, los cartílagos de crecimiento de tus huesos acaban de cesar su actividad. Tu cuerpo acaba de terminar su formación, por eso la estructura de tu cuerpo es más inestable de lo que piensas. A los 20 es importante que te cuides de ciertos esfuerzos, por ejemplo, de abusar de las grandes cargas en el gimnasio.e
En condiciones normales, los músculos de una mujer que no entrena alcanzan su máximo de fuerza a los 26 años. Es decir que, hasta entonces, su musculatura sigue en fase de evolución. Las mujeres que entrenan puedn retrasar este pico hasta los treinta y pocos.
El mejor deporte: que sea variado y divertido
Uno de los errores más frecuentes en veinteañeras es limitar su actividad deportiva al gimnasio, incluso las hay que, dentro del gimnasio, limitan su entrenamiento a trabajar solo zonas específicas como los glúteos. Es un grave error porque esto provoca la carencia de forma en el resto de cualidades, justo en el momento de formación. De ahí vendría el importante desequilibrio que puedes ocasionar en tu cuerpo.Es el momento de practicar los deportes que te gusten y cuanto más variedad des a tu cuerpo mejor preparado estará para el futuro. Huye de la especialización precoz. Por ejemplo, está bien que corras, pero también deberías practicar algún deporte de raqueta, patines, bailes, etcétera. Aprovecha la vitalidad que tienes para hacer todo aquello que te apetece. Ya llegarán las épocas más adecuadas para la especialización.
Lo bueno de los 20 es que prácticamente nadie tiene la necesidad de ponerse a hacer ejercicio de manera intensa por motivos estéticos, ya que, salvo casos de sobrepeso, todo sigue en su sitio. Lo malo es que es fácil acordarse de la necesidad de hacer ejercicio cuando te ves bien delante del espejo. Por eso, a los 20, insistimos en que hay buscar deportes que te gusten, de manera que no te tengas que obligar a hacerlos, sino que los practiques por mera diversión.