El entrenamiento por semanas se basa en fijar un plan para cada semana de manera que suponga un reto relativamente fácil en cuanto a su mecánica, pero a la vez físicamente exigente.
Por ejemplo, reto de la semana:
- 300 sentadillas
- 200 dominadas con asistencia
- 200 flexiones en una barra a media altura.
- 20 Km corriendo
- 100 zancadas
- 300 abdominales
A la hora de establecer estos retos semanales es importante que pienses en el equilibrio, que busques un plan en el que trabajen tren superior y tren inferior, en que haya ejercicios de fuerza y de resistencia, en el que haya ejercicios de empujar y de tirar. Si en una semana no puedes incluirlo todo, no te preocupes, ve compensando semana a semana de manera que al final del mes sí te salga un equilibrio en el plan.
Por supuesto, es necesario que seas coherente con el número de repeticiones por hacer, kilómetros por correr o kilos por levantar. Si te pones un total que no te permita margen de error, sólo con que falles un día te resultará imposible completarlo.
Importante
Escoge ejercicios de acuerdo a tu nivel. Por ejemplo, si no eres capaz de hacer una flexión o una dominada, no te pongas como objetivo hacer 100 en una semana, es imposible. En ese caso busca un ejercicio de nivel inferior. Con el tiempo podrás con todo.
No intentes hacer todas las repeticiones en una sola sesión. Si pudieras hacerlas, significaría que te has puesto un reto demasiado fácil, o que has cometido una locura y no te vas a poder mover en toda la semana. Divide el total entre 3 o 4 sesiones de entrenamiento. Recuerda que tu cuerpo debe descansar.