El susto de Lourdes Montes y Cayetana
Después de que este mismo sábado, 8 de agosto, la viéramos presumiendo de sonrisa en el Puerto de Santa María, en Cádiz, donde acudió como fan número uno para ver torear a su marido, Francisco Rivera, al día siguiente la alegría de Lourdes Montes se convirtió en preocupación. La plaza de toros de Marbella fue testigo de una faena complicada en la que nuestra bloguera vivió momentos muy delicados tras el susto del torero, cuando el primer toro le enganchó por detrás tirándole al aire y cayendo al suelo, donde hasta tres veces fue a por él.
La intranquilidad y el nerviosismo podían verse reflejados en el rostro de Lourdes, que se encontraba en barrera a unos quince metros de su marido. Muy agobiada e inquieta por el estado de salud de Paquirri, las cámaras de los fotógrafos captaron este momento en el que nuestra bloguera se sujetaba su 'tripita', quizá como intentando transmitir a su bebé que, para su alivio, estaba todo controlado y el miedo ya había pasado. Y es que si todo sale según lo previsto, saldrá de cuentas el próximo 20 de agosto, según confirmó el propio Francisco, por lo que estos sustos y situaciones delicadas no le vienen demasiado bien dado que está en las últimas semanas de embarazo.
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Tras un breve paso por enfermería, el diestro volvió a saltar al ruedo para matar a su último todo de la tarde, sin consecuencias graves que lamentar más allá del tremendo susto, a pocos días de ser papá. En la grada la preocupación se hacía extensible a Cayetana, la hija de Francisco, que también se encontraba presenciando la corrida y compartió la inquietud con Lourdes, aunque después, y tras ver que su padre estaba totalmente fuera de peligro, la sonrisa volvió a su rostro y disfrutó del resto de la jornada con Talavante y Morante de la Puebla. Entre el resto de invitados estaba Cayetano Martínez de Irujo y el futbolista español de la Fiorentina, Joaquín Sánchez, al que Morante brindó un toro.
Aunque Francisco se ha tomado muy en serio su vuelta a los ruedos y su agenda profesional está repleta, tiene claras sus prioridades y su intención de estar presente durante el parto: “Lo que sí sé es que donde esté saldré corriendo y cuando llegue, llegué. El torear pensando que tu mujer está dando a luz no es ni aconsejable. Saldré corriendo para Sevilla”, confesaba recientemente. Y es que Francisco y Lourdes, que celebraron su boda religiosa el verano pasado, se han vuelto inseparables y están muy felices e ilusionados ante la llegada de su primera hija, una niña a la que, tras muchas idas y venidas, finalmente le han puesto Carmen, un nombre que les encantaba a ambos y con el que además rinden un precioso homenaje a la madre del torero, la recordada Carmina Ordóñez.