Colin Farrell y otros bigotes icónicos
La nueva temporada de 'True Detective' ha dado qué hablar gracias al nuevo 'look' del actor, encargado de encarnar a Ray Velcoro
Aunque aún quedan muchos meses para movember, hay un bigote que está dando tanto que hablar, que parece que este año el movimiento que incita a los hombres a dejarse crecer el mismo se esté adelantando a la temporada de verano: el de Colin Farrell, nuevo 'fichaje' protagonista de la serie 'True Detective', que estrena su segunda temporada el próximo 21 de junio, y en la que el actor y nueva imagen de Dolce & Gabbana se meterá en la piel del detective Ray Velcoro.
El nuevo look de Colin Farrell, con bigote de estilo herradura y aire a los años setenta, ya daba que hablar a principios de año, cuando hizo aparición por primera vez con él en el escenario de los premios del Sindicato de Actores. Tampoco es el primero (ni será el último), que se deja crecer un bigote icónico: la gran pantalla ha reunido a muchos de los grandes bigotes de la historia, empezando por el bigote cuadrado de Charles Chaplin o el de tipo lápiz de Clark Gable, y terminando por el recurrente combo de bigote y perilla de Brad Pitt, que vuelve al rostro del actor aproximadamente cada cinco años.
El más popular de todos: quizás el de Tom Selleck, un auténtico icono en el universo del vello facial desde el estreno de la serie de televisión 'Magnum P.I.' en 1980, y también el más espeso: para conseguir un bigote similar se necesitan en torno a cuatro meses, además de un buen número de productos de grooming, empezando por ceras naturales de fijación media, tijeras rectas y un peine corto específico, y terminando por la textura y consistencia adecuadas (algo que sólo proporciona la genética), con preferencia por el vello liso y recto en lugar de rizado.
Menos acertados han sido otros cambios de look, casi siempre por exigencias de guión, y que han durado lo mismo en el rostro de sus portadores que lo que se tarda en decir 'corten': entre ellos estarían George Clooney y el actual James Bond, Daniel Craig, a quienes el bigote de tipo chevron (espeso y algo más fino en las comisuras de los labios que bajo la nariz), les añade unos cuantos años de más; o James Franco, de barba algo más escasa (un tipo de vello facial que suele funcionar bien con los microinjertos en esta zona), y que también entraría en esta categoría de bigotes más o menos 'desacertados'. La versión cool del bigote en la actual meca del cine: el de Ryan Gosling, que se decanta por la sombra de vello de unos pocos días tanto en el labio superior como en el mentón, con algún que otro experimento con el bigote partido.
Otros bigotes icónicos: el tipo Dalí, que lleva el nombre del pintor surrealista, el de Freddie Mercury, de tipo piramidal, o el incipiente, que se sitúa en el extremo opuesto del ring y que tiene entre sus portadores a Justin Bieber, o los bigotes de leche que han puesto de moda muchas celebs.
Los recordamos todos en la galería de imágenes.