Fernando Fitz-James Stuart y Solís es un joven que ha llevado hasta ahora una vida bastante alejada de la atención pública. Se trata del hijo mayor del actual Duque de Alba, Carlos Fitz-James Stuart y uno de los nietos favoritos de su abuela.
El joven, que nació el 14 de septiembre de 1990 fruto del matrimonio del duque de Huéscar con Matilde Solís, tiene por tanto 24 años y ha llevado siempre una vida muy discreta, al igual que su hermano Carlos (que nació en 1991). Su infancia y adolescencia la pasó en Madrid, aunque tras la separación de sus padres viajaba con regularidad a Sevilla para visitar tanto a Doña Cayetana como a sus abuelos maternos, los Marqueses de la Motilla y donde además practicaba uno de sus entretenimientos favoritos, la equitación.
Una vez terminado el Bachillerato, Fernando se trasladó a Gran Bretaña, donde estudió Derecho y posteriormente continuó su formación en Madrid haciendo Dirección de Marketing en el CIS (The College for International Studies).
Además se sabe que la fallecida Duquesa de Alba le tenía un cariño muy especial ya que adoraba Sevilla como ella, es un apasionado de la Semana Santa y tiene un carácter que recuerda mucho en su alegría al de Doña Cayetana. Por eso dicen que en el reparto de la herencia le habría legado el palacio de las Dueñas.
Fernando, que será el futuro Jefe de la Casa de Alba se convertirá llegado el momento en el 20º Duque de Alba y heredará unos 50 títulos, incluyendo nueve ducados, 30 propiedades y colecciones de arte de valor incalculable. Ha llevado una vida reservada y alejada de la atención, aunque hace unos meses su nombre fue incluido por la prestigiosa revista francesa ‘Point de Vue’ entre los 40 mejores ‘partidos’ del planeta.
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