El fallecimiento repentino del padre de Nicole Kidman el pasado 12 de septiembre en Singapur sumió a la actriz en una profunda tristeza. Han pasado dos semanas del triste desenlace y ha sido la propia Nicole Kidman y su marido, Keith Urban, quienes han querido agradecer el amor, respeto y las muestras de cariño de todo el mundo a través de un comunicado:
"Nos gustaría dar las gracias a todos por vuestro amor y oraciones en las últimas dos semanas. Estamos desconsolados, pero saber que estamos en el corazón y en las oraciones de otros es muy reconfortante. Con todo nuestro cariño, Nic y Keith xx".
Sin duda el mejor apoyo de la intérprete en estos instantes de dolor ha sido de su familia: su marido, Keith Urban, y sus hijas. Nicole estaba muy unida a su padre, Anthony Kidman, en alguna ocasión había dicho de él "Es un gran padre. Le puedo llamar a las tres de la mañana y él está ahí para mí". El doctor Anthony Kidman sufrió un ataque al corazón mientras estaba en Singapur visitando a su hija Antonia que reside allí con su familia. Se trasladó hasta allí una ambulancia y se le hizo una reanimación cardiopulmonar, tal y como informaron los servicios de protección civil, aunque nada se pudo hacer por salvar su vida.
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